domingo, 20 de abril de 2014

Cartas de un soldado desde el frente.


Cartas de un soldado, de Gerena.
"Querida madre:"
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Introducción
            Manuel indaga siempre en el pasado con indudable acierto y lo atestigua  el éxito de su blog , “Fotos y postales antiguas de Sevilla”. El nombre, sin duda estuvo bien escogido en un principio. Luego, la propia naturaleza de su trabajo  de búsqueda y recuperación de materiales de diferente procedencia  no le hace justicia, porque Manuel aporta no solo fotos, sino infinidad de documentos de la intrahistoria, de esos que cobran valor con el paso del tiempo porque ayudan a entender la vida cotidiana de la gente que nos precedió, sus preocupaciones, su forma de vivir las circunstancias en las que el azar los implicó.
            El documento que ahora nos ofrece es un pequeño conjunto de cartas desde el frente de un soldado del ejército que se rebeló contra el gobierno legítimo de la República.
            No esperéis noticias de la guerra; si acaso, alguna vaga referencia de que tuvo que dejar de escribir una carta a su tío Julián, – lo estaba haciendo sobre la culata del fusil-, porque los “canallas de los rojos” , situados en una trinchera vecina del frente del Jarama, habían empezado a disparar y él tuvo que dejar la carta inconclusa para devolverles los disparos.
            Para mí es mucho más significativo el mensaje entre líneas, no demasiado manifiesto porque las cartas son abiertas por la censura militar.  Algunas constantes se producen en esas breves líneas y pueden ayudarnos a interpretar los estados de ánimo de un hombre, un muchacho, que seguramente nunca había salido de su pueblo, que es arrancado de su casa y arrastrado a una guerra.
            Primero: Debe ser duro que te monten en un tren camino de una guerra y tú no conozcas tu destino. No puede comunicarlo a la familia; no sabe a dónde va, pero aunque lo supiera, no puede decirlo a la familia hasta llegar al final de ese viaje. Eso no lo dice él, pero sabemos que existía esa prohibición, para evitar que se convirtiera en información del movimiento de tropas para el enemigo. En otras cartas lo manifiesta desde una perspectiva diferente. No sabe dónde va a estar. Ha de confirmar una y otra vez su dirección. Así es la guerra. Tú no eres dueño ni del espacio ni del tiempo; ni de tu propia vida, porque otros se la apropiaron y disponen de ella.
            Segundo: La necesidad en cada carta de tranquilizar a su madre, la gran referencia, junto con su tío Julián; siempre insiste en que está bien y en que no necesita nada, hasta que la necesidad es tan extrema que debe solicitar algún dinero para lavar la ropa; cuando comunica  que está  herido,  asegura que  es una herida leve. A su tío, no obstante, le reconoce la gravedad y que, probablemente, será evacuado al hospital de Sevilla desde Plasencia.
            Tercero: La pobreza del soldado. No puede escribir a la familia con la frecuencia deseada porque no tiene dinero para pagar el papel. No lo creeríais, pero una de las grandes carencias de la España de entonces era el papel. No había papel. No hubo papel abundante al alcance de la gente hasta muchos años después de terminada la guerra.  Tampoco puede lavar la ropa, porque carece de dinero para ello. Necesita lavar la ropa con prontitud porque tiene muy pocas prendas y en Madrid, el destino que le espera cuando se reponga de sus heridas, hace frío en Enero.
            Cuarto: La censura militar. Aunque la desesperación más miserable hiciera mella en el ánimo del soldado adolescente, aunque tuviera deseos de comunicarle a alguien las insoportables condiciones de vida en las trincheras  donde asomaban su rostro el hambre, la suciedad, el miedo y el cansancio extremo, la guerra lo habrá hecho madurar de pronto. Tiene que cuidar cada palabra que escribe a su familia, ser prudente. De otra forma, correrá dos riesgos; el primero, que la carta nunca llegue a su destino; el segundo, que sea considerado un desafecto, un generador de desánimo entre sus compañeros de sufrimiento y entre la población civil de retaguardia, un desertor potencial, un enemigo casi entre las propias filas. ¡Cuidado con lo que dices y con lo que escribes!
Quinto: El otro combate de la guerra fue ideológico. Masas de jóvenes incultos que se utilizaban para consumar un golpe de estado sanguinario recibían cada día un adoctrinamiento feroz, cuyo objetivo era convertir a los de la trinchera de enfrente en enemigos diabólicos, “los que violarán a tu novia o a tu hermana, los que te quitarán tu casa, los que van a quemar el Cristo de tu pueblo…” Esas “teóricas del odio” siguieron siendo un instrumento del ejército franquista hasta el advenimiento de la democracia. Quiero creer que entonces acabaron, pero no lo aseguro. Doy fe porque yo las soporté durante muchas tardes cuarteleras. Vi el rostro brutal y convencido del fascismo militante con una carga de estrellas en el hombro, aun llenos de odio contra la España democrática que estábamos gestando a duras penas. Doy fe porque escuché al capellán militar dar gracias a su dios por el caudillo que  había eliminado al enemigo de Dios y de la Patria. Doy fe porque un alférez asustado ordenó formar la guardia, cargar las armas y apuntar a una manifestación de trabajadores del metal que cruzaba ante el cuartel del Batallón Soria 9 con pancartas de Comisiones Obreras.
            Y ese muchacho , al que por su forma de escribir, no puedo suponerle una ideología muy arraigada, llama “canallas rojos” a los otros muchachos que defendían a la República, el gobierno que proponía en su beneficio una reforma agraria que permitiera una distribución más justa de las tierras entre los hombres pobres, una reforma educativa que permitiera a toda la población una educación general y gratuita , el voto femenino, la igualdad ante la ley, y las libertades que un ser humano necesita para sentirse dueño de su vida. Seguro que este muchacho no sabía lo que yo sé.
            El otro aspecto que a mí me estimula sobremanera es reencontrarme con esa escritura fonética que aprendí a deletrear, de niño, con las cartas de mi propia familia.  Escriben como hablan, o como imaginan que es correcto. El aprendizaje mecánico de la lectura y escritura no permitía desarrollar habilidades para el lenguaje escrito. Pocos libros habría al alcance de sus manos. Y aun menos oportunidades para leerlos. La España pobre, aun sin saberlo, era rabiosamente proletaria. Cualquiera de aquellos muchachos ya trabajaba a los siete u ocho años para ayudar a la familia. Un consuelo nos queda a los filólogos. Hubo un comediógrafo en Roma que escribió sus textos tal como el pueblo llano hablaba. Gracias a su ocurrencia hoy sabemos cómo pronunciaban su lengua los romanos. 
            Cualquier legado humano es digno de agradecimiento.
            Solo me queda agradecer a Manuel que me haya honrado invitándome a dejar mis reflexiones en su blog y  su persistente búsqueda de trozos del pasado que generosamente pone a nuestro alcance.
            Y  quiero felicitarlo por su acierto en los contenidos de su blog.

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Mi agradecimiento a mi amigo Antonio Jimenez, profesor de Latín y novelista, por regalarnos esta  interesante reflexión, que enriquece notablemente este humilde blog.
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Mi más sentido pésame a toda su familia, ya que este buen amigo, gran escritor e inmejorable humanista, nos ha dejado el día 5 de Junio de 2020.

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TRANSCRIPCIÓN DE LAS CARTAS MANUSCRITAS
                Notas del editor:
·         Se marca en negrita el lenguaje formular – fórmulas repetidas - de las cartas de la época. Probablemente el niño lo aprendió al dictado de la propia familia cuando se recurría a  él, que aprendió a escribir, para comunicarse con los otros miembros de la familia que viven distanciados. El peso de la ”fórmula” es tan potente que en el saludo siempre aparece la palabra madre, mientras en el resto del escrito el término empleado  es  mama,  el verdadero apelativo con el que este soldado se ha dirigido a su madre durante toda su vida.
·         A medida que vemos disminuir el peso del lenguaje formular en las cartas, crece el contenido informativo. El lenguaje formular es solo para decir, “estoy bien”. Cuando las necesidades de comunicación responden a otras razones, el lenguaje formular queda relegado casi al comienzo y al final del escrito.
·         Prefiere mantenerse la forma mama (llana inacentuada) en lugar de mamá (aguda acentuada) porque la primera es el uso coloquial de la época.

·         Nos hemos permitido incluir entre paréntesis (…) términos ausentes en el escrito original o correcciones nuestras para adecuarnos a las exigencias de una expresión correcta.
Ceuta, a seis de octubre de 1936
                Querida madre:  mucho me alegraré (de) que, al ser esta en su poder, se halle Vd. buena, en  unión de toda la familia. 
                Mama, esta es para decirle  que he llegado muy bien. No me mareé en el barco porque estaba la mar muy buena.  Mama, sabrá usted que nosotros no sabíamos nada hasta que el domingo comimos y nos sacaron para el tren; de modo que estuvimos  toda la noche y todo el día del lunes entre barco y tren, pero hemos llegado bien gracias a Dios. Mamá, sabrá usted  que cuando llegamos nos pelaron y nos dieron la ropa.
                 Mama,  le dirá  usted  a tito Julián que no le he escrito porque no puedo escribirle ahora.        Mama,  sabrá usted que Julián me dio 15 pesetas.  A mí no (me hace ) falta nada, de modo que usted no se disguste. Yo lo que quiero (es) que estén ustedes  buenos todos.
                 Mama me dirá usted  si Juan ha cobrado,  o no.
                Y  sin más que decirle, muchos besos  para la niña, para abuela,  para Juan, para Pilar y el niño
                               Usted recibe un fuerte abrazo de su hijo que la quiere de corazón
                                Francisco 
La seña es: (dirección)
Batallón de cazadores Serallo,n 8
4º compañía (Ceuta)
Las cartas les llegaban a su madre, abiertas por la Censura Militar.
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Zoco de Arbaa, 16 de Noviembre de 1936.
En esta carta le dice a su madre, que está muy contento por que el señor Juan le haya dado a ella 125 pesetas. También escribe, de que hay rumores de que van a salir para la península. Y por último les he escaneado esta tercera página de la misma, porque para mi no tiene desperdicio, al extremo que llegaban las necesidades de Francisco
…/… usted a él, mama. También le digo que hay aquí un retratista, pero no tengo ni una gorda para retratarme. A ver si cobro una peseta  antes (de) que se vaya y me voy a retratar. Porque tenía una peseta pero (he) estado cuatro días en la cama resfriado y la gasté en chocolate. Pero ya estoy bien. Mama, desde que vine no fumo, porque no tengo una gorda. Y lo que gano es para jabón, hilo y para las cartas. Aunque no nos cuesta(n) nada los sellos, pero vale 0,25 el papel. Mama, sabrá usted que me ha escrito Mariana, porque está conmigo un muchacho que estaba en su casa, y se lo mandó  decir, que estaba aquí con un sobrino suyo y enseguida me escribió…/…
Han pasado ya cincuenta días desde que Francisco se incorporó al ejército, y le escribe a su madre esta carta, de la que vemos la segunda hoja, donde se nota que Francisco, está cansado o triste, quizás, por la fecha tan señalada en que fue escrita, el día de Navidad, 25 de Diciembre de 1936.
En esta carta le habla de sus amigos, a los que tan solo los ha visto dos veces, .../... pero que ahora están en la misma columna del teniente coronel Barón y a todos lados tenemos que estar juntos. Mama, de lo que me dice usted del dinero, le digo que mientras esté aquí no quiero nada, porque aquí no hay ganas de nada. Mama, le dirá usted a tito Julián y a Encarnación que no le escribo porque no tengo tiempo.  Esta carta la (he) escrito junto con Maximino el de Leonardo, el del Rubio, y todos los de Gerena.
                Y sin más que decirle, besos para toda(s) la(s) familia(s) y usted recibe un fuerte abrazo de su hijo que nunca la olvido (olvida).
                 Francisco
Cuando escribió esta carta Francisco, se encontraba en el Regimiento de Infantería nº 8 (Batallón expedicionario -3ª Compañía) de Móstoles (Madrid). Allí fue herido por el bando contrario, y posteriormente fue trasladado a Plasencia, Cáceres.
Plasencia, 7 de enero de 1937
                Querida madre, mucho me alegraré (de) que, al ser esta en su poder, se encuentre(n) todas buenas. Yo quedo bueno y con ganas de verlos. Mama, esta es para decirle que estoy herido, pero leve; de modo que estaré en el hospital unos cuantos (de) días. A ver si me puede mandar algún dinero para lavar la ropa, que me hace  mucha falta, porque en la parte de Madrid hace mucho frío. Mama, me lo manda usted telegráfico para que venga más pronto.
                Sin más que decirle, besos para Amparito, la abuela y toda la familia y usted recibe un fuerte abrazo de su hijo que nunca la olvida
Certificado de Correos. El dinero para poder lavar su ropa, le llegó a Francisco, el día 21 de Enero.
Plasencia, 21 (de) enero 1937
                Querido tito Julián, esta es para decirle que cuando me escriba usted, me escriba a la misma dirección, porque tengo herida para el rato (para rato). Tito, creo que quizás me evacúen para Sevilla, porque el médico se creía que la herida iba a durar menos. Y de lo que me decía usted del sanitario, me he dado a conocer con él y me ha dicho que, si se lo hubiera dicho antes, pudiera haber ido al hospital de Sevilla , pero (que) con todo y con eso  va a hacer todo lo que pueda.
                Y sin más que decirle, memoria* para María , besos para el niño y usted recibe un fuerte abrazo de su sobrino
                                                               Francisco.
* Extraño uso del término “memoria”. Lo habitual es  “recuerdos a”

 Julián, el tío de Francisco, le reenvía esta misma carta, a la madre de este, ya que estaba él, a través del "señorito" de la casa donde trabajaba en Sevilla, intentando traerse a Francisco, unos días a casa, y antes la insistencia de la madre, Julián le pone una nota al dorso donde le dice: que ya ha hablado con el "señorito" varias veces - que va a hacer lo que pueda-, y si ella no se lo cree, que venga ella a hablar, porque él, ya ha hecho lo que podía.
Plasencia, 21 de enero de 1937
                Querida madre, esta es para decirle que estoy lo mismo, y (que) voy a estar más tiempo (del) que me creía; de modo que me escribe usted en (a)  la misma dirección. Mama, estuvo hablando conmigo el teniente médico y me dijo que  lo que usted quería no podía hacerlo; que lo que podía hacer era irme (¿mandarme?) al hospital de Sevilla. De modo que no sé lo que hará, si me mandará o no; pero si le hubiera escrito el médico de la aviación, como dice tito Julián, ya estuviera (estaría) yo en Sevilla; el médico no ha recibido más carta que la que ha mandado usted. Y él me la enseñó a mí y me dijo que le había contestado a usted. De modo que a ver lo que pasa.
                Y sin más que decirle, besos para Juan y Amparito, (la) abuela y (el) niño; memoria para Pilar; y usted recibe un fuerte abrazo de su hijo
                               Francisco.
                (PD) Mama, ahí lleva usted un retrato; estoy muy mal, pero para que usted me vea.
Por lo leído en esta carta, la recomendación del "señorito" que iba a ser de un médico de aviación amigo de él, nunca llegó a su destino, la única carta que le llegó al teniente médico del hospital, fue la de su madre.

Carta escrita desde las trincheras del frente del Jarama, el 21 de Enero de 1937.
Querido tito Julián, mucho me alegraré (de) que, al ser esta en su poder, se encuentre usted bueno en unión de María y el niñoTito, esta es para decirle que estoy bueno y (que) estoy en las trincheras del frente del Jarama. Estamos a dos pasos de los rojos; siempre nos estamos hablando; siempre nos están dando (el) mitin. Nos vemos como si estuviéramos juntos, porque son las avanzadillas nuestras y las suyas, y por eso estamos tan juntos; y nunca para (descansa, se detiene)  el tiroteo, pero estamos bien.
                Tito, de lo que me dice usted de que adonde (en dónde) estuve aquella noche, pues estuve en el cuartel.
                Tito estas cuatro letras las escribo en la culata del fusil, y las tuve que soltar para tirarle a los canallas rojos que, mientras la(s) estaba escribiendo, no dejaban de tirarme; pero en este (ese)  momento se presentó la aviación nuestra  y se callaron los canallas; y por eso la(s) he podido terminar.
                Y sin más que decirle, memoria para María, (y) todas las vecinas; besos para el niño, y se despide su sobrino que pronto desea verlo.
                Adiós.
El 22 de Marzo de 1937 llegó Francisco al Regimiento Serrallo nº 8- Batallón B, de Pinto (Madrid), desde donde le escribió dos cartas a su madre, intentando tranquilizarla, por lo grave de la situación, y diciéndole lo mucho que la quiere.
Y aquí, pierdo la pista de Francisco.
Quienes no conocen la historia, están irremediablemente condenados a repetirla. Haber si puede ser que aprendamos.
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Entrada dedicada con todo cariño, a mis amigos Estela y Pepe Vega, quienes nos deleitan el paladar todos los fines de semanas, con unos deliciosos "calentitos" (que ellos saben hacer como nadie), y un exquisito chocolate.

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69 comentarios:

  1. Querido Manuel, cómo me han emocionado esas cartas, que rezuman ternura y sentimiento en situaciones limite. Tuve el gusto de verlas por encima cuando me las enseñaste, pero ahora, al leerlas, he sentido escalofríos y compasión por esa generación que tuvo que sufrir los horrores de aquel enfrentamiento cruel entre hermanos. Un abrazo y mi enhorabuena.

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    1. Es realmente impresionante, me he emocionado hasta lo más hondo del alma. Estos documentos son valiosísimos, tanto por lo histórico como por la enorme moraleja que contienen.

      Un trabajo inmensamente aleccionador, dignísimo y que lo tratas con exquisita sensibilidad y precisión. Al igual que el amigo José Luis, me conmueve y me impacta todo lo que aquella maldita Guerra "Incivil" ocasionó. La Historia es Maestra, que no se vuelva a repetir jamás algo semejante, es la peor guerra de todas, hermanos contra hermanos ¡No por Dios!

      Te agradezco mucho tu trabajo, Manuel, sobre todo, lo valoro.

      Un fuerte abrazo.

      Mari Carmen.

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    2. Muchas gracias a los dos, Mari Carmen y José Luis, y estoy totalmente de acuerdo con vosotros.
      Un fuerte abrazo para ambos.

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  2. Pura realidad bien transmitida por esta vía. Un fuerte abrazo.


    Guillermo

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  3. ESTOS DOCUMENTOS SON UNA RELIQUIAS. GRACIAS POR COMPARTIR ESE SENTIMIENTO.
    UN ABRAZO

    http://enancasdelarazon.blogspot.com/

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    1. Muchas gracias, Adolfo. Te comento por si lees esta respuesta, que desde que cambiaste hace ya tiempo a Google+, me es imposible comentar en tu blog, no sé porqué, pero el sistema no me lo permite.
      Un fuerte abrazo.

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  4. Tremendo documento y en el otro lado otro que escribirá asu madre, no les han tenido para que se enfrente, ni se conocerán, la paz no debe romperse por nada que quienes provocan la rotura de la misma saben atecharse, un abrazo!

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  5. Very interesting dear friend!
    Happy Easter time!

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    1. Muchas gracias, Nella y bienvenida.
      Un cordial saludo.

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  6. RESPETANDO EL CREDO QUE TENGAS, DESDE EL MÍO TE DESEO FELICES PASCUAS!! Y MUY BUENA SEMANA!!

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    1. Muchas gracias y lo mismo te deseo.
      Buen fin de semana.
      Un abrazo.

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  7. ¡Muy interesante y curioso como siempre! Siento que no hayas podido disfrutar la Semana Santa de Sevilla. Espero que mis imágenes te hayan reconfortando o provocado en ti bellas añoranzas. ¡Mucho besos!

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  8. Y tantas más que se perdieron así como se perdieron esos jovenes muchachos que se fueron al frente con una ilusión en ellos por la lucha de un país mejor que no lo fue.
    Tristeza me causa esos escritos.
    Gracias por compartir, un abrazo.

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  9. Hola Manuel. Qué interesantes estas cartas. Lo que me extraña es que en guerra, las cartas llegaran a destino. Se me pone la carne de gallina al leerlas. No he vivido esa época pero la conozco por lo que oído en boca de familiares y por los medios audiovisuales. Siempre he tenido mucha curiosidad por todo lo relacionado con aquella época.
    Muchas gracias !
    Un fuerte abrazo, Manuel

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  10. Aplaudo y felicito a Antonio y a Manuel por tan interesante entrada, creo que debe ser valorada en términos de calidad. El sentido que emana de esas cartas va más allá de unas líneas manuscritas o una creación epistolar no ficticia, tiene como elemento central la guerra, la ausencia, la separación, la enfermedad, la precariedad, y todo esto es tan real como que muchos se vieron impulsados a combatir sin saber dónde iban ni por qué.
    Esperemos que estas cartas sirvan para reafirmar la necesidad de paz que siempre desea la gente de bien.
    Un abrazo

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    1. Loli, en nombre de Antonio y mio, muchas gracias por tu amable comentario.
      Un fuerte abrazo.

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  11. Un post muy emocionante Manuel. Gracias por compartirlo. Aun tengo la carne de gallina.
    Besitos

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  12. Solo puedo imaginar el dolor y la angustia de esas madres anónimas receptoras de esas cartas. En fin, se me ha encogido el corazón. Saludos :D

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    1. No es para menos, amiga.
      Muchas gracias, y un cordial saludo.

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  13. Me has echo recordar las cartas que recibía y escribía mi madre desde Francia, a los dos bandos, porque en los dos tenía hermanos !!! Se comunicaban gracias a ella que les daba noticias de la madre.

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    1. Me consta de, que esto mismo le sucedió a muchas familias, una verdadera pena. Esperemos que no se repita jamás.
      Un fuerte abrazo.

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  14. Muito triste.
    Os documentos epistolares constituem uma ligeira aproximação à alma de quem viveu os acontecimentos. Estas cartas provocam-nos um arrepio emotivo e são um testemunho de um passado tenebroso que a Espanha deve recordar. Se não existe nunca guerra que seja boa, a guerra civil é sempre a pior e mais estupidificante de todas.
    A História é feita de tanta crueldade. Lemos as cartas desse filho, apenas poderemos imaginar o que vai no coração da sua mãe, de todas as mães nessa situação. E tudo em nome de nada, senão de mais injustiça e crueldade.
    Um grande post, Manuel. Comovente.
    xx

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    1. Estoy contigo, Laura. Todas las guerras son malas, pero la peor de todas el la guerra civil.
      Muchas gracias y un fuerte abrazo.

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  15. Un artículo muy emotivo. Mi abuelo también era de Gerena, como toda mi familia paterna, y también estuvo en el Jarama en el mismo bando. Quien sabe si se conocieron.

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    1. Hola, Cristy, pues con tantas coincidencias, no me extraña nada que se conocieran.
      Muchas gracias por tu comentario y bienvenida.
      Un saludo.

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  16. Manuel, entrar en tu blog es ver pedazos de historia, remover sentimientos y conciencias. Enhorabuena por tu trabajo. Un abrazo, Clara.

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  17. Hola Manuel, hace mucho tiempo que no nos visitábamos y me alegro que hayas venido a buscarme, me pierdo con tantos seguidores.
    Tu post me ha emocionado, pues he recordado muchas cosas de la guerra que mi santo abuelo me contaba. El soldado va despojado a una guerra que le da pavor.
    Nos has dejado una documentación de gran valor no solo histórico si no humana.
    Gracias
    Un gran abrazo
    Sor.Cecilia

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    1. Hola, Sor, me vas a perdonar que te diga lo que pienso, creo que andas un poco perdida con tantos seguidores, la última vez que me escribiste hace menos de un mes, me dijiste lo mismo. Te lo digo como amigo, tómalo con tranquilidad y no hagas de esto una cruzada. Yo sé que lo haces con muy buena fe, e intentas corresponder a todos. Además quiero decirte que tus comentarios siempre son muy bien recibidos aquí, pero me has dejado preocupado. Me gustaría haberte dicho esto en privado, pero no tengo tu correo.
      Un fuerte abrazo.
      Manuel.

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  18. Ahora vengo de nuevo y sabes? estoy emocionada,, te felicito, tienes una página muy rica en sentimientos, recuerdos imborrables, vivientes, es hacernos además recorrer tu tierra, apenas conocí Madrid donde tengo tíos abuelos de mi padre. me gustó mucho, quizás un día conozca más
    Un abrazo y reitero. Hermosa página

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    1. Muchas gracias, Soledad. Me alegro mucho que te haya gustado, y espero que pases cada vez que te apetezca. Para mi siempre es un placer tu visita.
      Un abrazo.

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  19. Me fascinan, estremecen y entristecen este tipo de cartas. Tengo algunas rescatadas que he ido subiendo a mis blogs y otras que en algun momento subiré. Cuanto se aprende con ellas de las dificultades de los tiempos pasados y del bien que disfrutamos y no valoramos. Gracias, Manuel, como siempre por tu valiosa aportación. Un fuerte abrazo.

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    1. Muchas gracias y voy a pasar ahora mismo por tu blog para ver esas cartas.
      Un abrazo.

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  20. Manuel. Verdaderamente estoy emocionado luego de haber leído las cartas, quiero felicitarte por tu aporte historico que haces dese éste sitio. Y me adhiero al Sr Jiménez en sus palabras hacia tu publicación.
    Un gran abrazo estimado amigo.

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  21. Mil felicitaciones por esta entrada tan excelente.

    La verdad es que me ha emocionado. Una información magistral.

    Un abrazo muy grande.

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  22. Es un orgullo poder leer estas cartas, Manuel, tener por tu mano testimonio de las penurias que pasaron todos los que intervinieron en una guerra tan salvaje.

    Ha sido emocionante y personalmente, te doy las gracias por traernos en tu blog tantos retazos de años y vidas pasadas.

    Extraordinaria la introducción de D. Antonio Jiménez.

    Besos apretaos

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    1. Gracias, yeste, y estoy totalmente de acuerdo contigo, en que el análisis de Antonio Jimenez es, una maravilla.
      Besos.

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  23. Felicidades Manuel y Antonio por esta entrada.
    Un documento histórico conmovedor como pocos.
    No me ha resultado difícil leer las cartas de Francisco porque tienen el mismo tipo de ortografía y expresiones que las que se recibían en mi casa desde el pueblo cuando yo era pequeña. Se me ha puesto un nudo en el estomago desde el principio y tardará en desaparecer.
    Me uno a tu deseo de que seamos capaces de aprender del pasado para no cometer los mismos errores.

    Un abrazo fuerte.

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    1. Muchas gracias, en nombre de Antonio y mía.
      Un abrazo.

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  24. Gracias, Manuel, por tus palabras y por este valiosísimo blog-documento que tanto aporta a nuestra reciente historia. Una maravilla.

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  25. Impresionante la entrada y los documentos, tienen muchísimo valor. En las cartas he recordado la letra de mi abuelo con la plumilla. Es historia pura que a la vez se hace presente. De todo corazón enhorabuena. Espero que hayas tenido buena Semana Santa, yo ya estoy de vuelta y he puesto algunas fotos en el blog por si quieres verlas. Un fuerte abrazo y feliz fin de semana amigo.

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    1. Muchas gracias, Pepe, y por supuestísimo que voy a pasar a ver ese reportaje.
      Un fuerte abrazo.

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  26. Hola Manuel.
    La entrada es un documento de gran valor. Ya quedan pocas cosas que puedan autentificar lo que entonces aconteció, me refiero a testimonios fehacientes. La historia se manipula según convenga, por eso es de ley reconocer la valía de estas aportaciones.
    Espléndido el trabajo, la exposición y argumentación.
    Enhorabuena!!!
    Un abrazo amigo.

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  27. Es para ponerle a uno los pelos de punta. Claramente se apropiaron de su vida. ¡Con qué derecho? Si su vida no vale, imagínate su intimidad: las cartas abiertas por la censura y este hecho reconocido sin ningún rubor. Cuánto sufrimiento tiene que padecer el ser humano, cuánto inocente arrastrado a la barbarie sin nigún sentido. El mundo en que vivimos es de locos.
    Un testimonio conmovedor, él estaba en una guerra pero su principal preocupación no era la guerra sino sus seres queridos, su sufrimiento y su bienestar. Era un intercambio para saber los unos de los otros, para saber si cuando todo acabara, seguirían estando todos.

    Muchos besos, Manuel, y muchas gracias.

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    1. Hola, Angie, se puede decir más fuerte, pero más claro no.
      Gracias por tu participación.
      Un beso.

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  28. Buenos días, perdone que me dirija a usted a través de los comentarios de su blog para hacerle una petición: la de, si usted da su permiso, poder tomar un par -no más- de postales de su blog sobre Triana, la antigua, para incluirlas en un artículo que sobre el barrio estoy preparando en mi blog (http://tiempoflamenco.blogspot.com.es/). Gracias por su atención; y si no puede ser, no puede ser. Saludos.

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    1. Estimado amigo, de perdones nada, todo lo contrario, gracias y me siento muy honrado con su visita.
      No hay ningún problema, además te ofrezco que si me quieres dar tu correo (que no lo haré público, ya que tengo activada la moderación), y si las tengo a mano esas postales o fotografías, te las mando sin el rótulo de mi blog.
      Y no dudes en pedirme, si en otra ocasión te hacen falta otras; yo estoy abierto a cualquier tipo de colaboración, desinteresadamente.
      De nuevo gracias, y un cordial saludo.

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  29. Excelente post, como siempre. Gracias por tu dedicación y por compartir tu trabajo con nosotros.
    Un abrazo! E*

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  30. Una guerra que se apropia de la Vida de un adolescente, de su contacto con su querida familia y trunca una vida plagada de ilusiones.
    Maravilloso documento Histórico.
    Como siempre un gran trabajo de investigación con esos testimonios que son las cartas, que emocionan y, por otra parte, llenan de dolor y estupefación.
    ¡¡¡Gracias, Manuel, por Estar y Ser!!!
    Abrazos mil.

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  31. Gracias Pedro. Y espero que continúe todo bien.
    Un abrazo.

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  32. Este tema me interesa mucho Manuel. Voy a tomar tiempo para leer estas cartas con pensamiento. Por ahora en la televisión finlandesa presentan la serie 'El tiempo entre costuras' que se basa en la novela de María Dueñas. La serie es muy buena, también he leído el libro... Algunos hechos pasan en Tetuán... Y La Guerra Civil me interesa mucho en general...

    Tu blog tiene muchas cosas interesantes para leer! Gracias!

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    1. Muchas gracias, y me comprometo en avisarte cuando publique otras entradas, que estoy preparando, de la guerra civil.
      Un abrazo.

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  33. Manuel conocer la HISTORIA, lo puse con mayúsculas en contraposición de la que nos pueden contar unos u otros, nos haría o eso creo no volver a repetir ciertos errores.
    Supongo que cartas como esas escribiría mi padre a mis abuelos y algo nos contó a los hijos y nietos de su "experiencia". Aunque lo podríamos haber visto escrito ya que escribió un diario que le desapareció justo al final.

    Saludos.

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  34. Siento esa desaparición del diario, hubiera sido un recuerdo entrañable y un tesoro para ustedes.
    Muchas gracias, Tomás.
    Un abrazo.

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