La Custodia de Sevilla.
Fue un alemán, Enrique de Arfe, llegado a España, a fines del siglo XV, el fundador de nuestra escuela de orfebrería. Instalado en León, difundió en pocos años a través de sus hijos y discípulos, su mensaje artístico a diversos lugares de la península. De sus manos privilegiadas salieron preciadas joyas -cruces, candelabros, custodias, etc., que enriquecieron el ya entonces cuantioso patrimonio de la Iglesia española. En 1517 cinceló la Custodia de Córdoba, y atraído sin duda, por el encanto de aquella ciudad - donde aún perduraba la herencia de los árabes- sentó allí sus reales, e inició una tradición de orfebrería que ha llegado hasta nuestros días.
La Custodia al regresar a la Catedral.
Hijo de Enrique de Arfe, fue Antonio, orfebre famoso también, que aún apartándose de la línea gótica de su padre para abrazar los cánones estilísticos que el Renacimiento imponía, logró espléndidas obras artísticas. Nieto del fundador de la dinastía e hijo del anterior, fue Juan, escultor, arquitecto y cincelador, al que se deben, entre otras, las custodias de Ávila, Burgos, Valladolid y Sevilla. Esta última, la más rica y espléndida joya de la procesión sevillana del "Corpus", ha sido sin duda, su más celebrada y conocida creación.
Juan de Arfe comenzó su trabajo en 1580. Previamente el Cabildo catedralicio había promovido el oportuno certamen con objeto de elegir el mejor dibujo para la nueva Custodia. Con Arfe se presentó al concurso el artífice Francisco Merino, que si no consiguió salir triunfante, recibió el encargo de realizar la Cruz Patriarcal que lleva su nombre. Para obtener la plata necesaria autorizó el Cabildo la fundición de la vieja custodia ojival, obra de los maestros alemanes Nicolás y Marcos, de una imagen de la Virgen y de varias coronas existentes en la capilla de la Antigua.
La Custodia bajo los arcos de triunfo, en la Plaza de San Francisco.
Siete años empleó Juan de Arfe en su delicada tarea. Con él colaboraron varios plateros sevillanos - Ballestero el Viejo, entre otros- y un ilustre humanista, el canónigo don Francisco Pacheco, tío del pintor de idéntico nombre, que diseñó alegorías y símbolos. La obra en fin, fue digna del esfuerzo de los orfebres. Tan satisfecho quedó su principal autor que el mismo año que remató el trabajo dio a la imprenta un curioso opúsculo titulado "Descripción de la traza y ornato de la Custodia de Sevilla" donde hizo una detallada relación de las especiales características de tan sublime y admirable joya.
Custodia de Juan de Arfe.
La Custodia -verdadera obra arquitectónica de estilo plateresco- alcanza más de tres metros de altura y pesa cuatrocientos treinta y cinco kilos. Cuatro cuerpos que guardan entre si deliciosa armonía forman su gallardo conjunto, prodigio de proporción y de gracia. cada uno de ellos abarca veinticuatro columnas. Las del primero son de orden jónico; las del segundo, corintio; las del tercero y cuarto, de orden compuesto. En el centro del primer orden aparece una Inmaculada Concepción y entre las columnas del mismo, varias esculturas de Santos y Doctores de la Iglesia, obras todas ellas de los posteriores restauradores de la Custodia. La Concepción sustituyó a una imagen más pequeña de la Fe, que Arfe había colocado sobre un trono en ese mismo lugar.
Entre las columnas del segundo cuerpo figuran los Santos Patronos de Sevilla, y dentro del mismo un viril donde se alberga la Hostia Santa. Juan de Arfe situó sobre la balaustrada de este cuerpo doce ángeles niños con los instrumentos de la Pasión, que el restaurador, Juan de Segura -"profesor sin reputación"-, según frase de Rosell y Torres, "en la república de las Bellas Artes y desconocido por su habilidad en la Corte y demás ciudades de Reino", cambió por estatuillas de ángeles mancebos, mayores que las primitivas, peor de inferior calidad artística. En el tercer cuerpo aparecen hoy los ángeles niños retirados del cuerpo inferior, en vez de las figurillas labradas por Arfe, que representan los dones y frutos de la Sagrada Eucaristía. En el interior del templete aparece el cordero con el libro de los siete sellos. En el cuerpo superior, el restaurador referido colocó remates torneados en lugar de los candelabros y flameros de graciosa silueta, modelados por Arfe. Una representación de la Santísima Trinidad ocupa el centro de este cuerpo. Corona la Custodia una efigie de la Fe, obra también de Segura, desproporcionada y de escasa esbeltez. No obstante los reparos expuestos, la Custodia conserva sus líneas primitivas, sin que las restauraciones posteriores hayan desvirtuado la magnífica obra de Arfe, pieza esencial de la liturgia eucarística de Sevilla e inagotable cantera de inspiración para los orfebres contemporáneos.
Fuentes: Bibliografía y archivo particular.
What an incredible artist.
ResponderEliminarMuchas gracias, Sue.
EliminarUn saludo.
Un articolo esplicativo che acquista fascino anche in merito alle belle fotografie.
ResponderEliminarBuona settimana e un saluto
Muchas gracias, Silvia.
EliminarUn saludo.
Siempre he admirado esas impresionantes obras de arte amigo Manuel, muchísimas gracias por compartir con nosotros.
ResponderEliminarFeliz semana.
UnAbrazo
Muchas gracias.
EliminarUn abrazo, José Antonio.
Siete años bien empleados para legar una joya orfebre que ya es historia del arte.
ResponderEliminarUna verdadera obra maestra.
Un fuerte abrazo, Manuel.
Muchas gracias.
EliminarUn fuerte abrazo, Miguel.
Que bonita es. Un buen reportaje. Besos.
ResponderEliminarMuchas gracias, Teresa.
EliminarBesos.
Impresionante!!!
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias, Alfred.
EliminarUn abrazo.
¡Que maravilla de Custodia! Un trabajo realmente impresionante. Gracia Manuel.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias.
EliminarUn abrazo, Conchi.
Una magnífica obra!!.
ResponderEliminarSin duda, admirable.
Un fuerte abrazo, Manuel.
Feliz semana.
Muchas gracias, Amalia.
EliminarUn fuerte abrazo.
Hay mucho arte, dentro de nuestros templos. Es una Custodia digna de admirar.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias.
EliminarUn abrazo, Antonia.
Es preciosa. Desconocía de su existencia así que ha sido un placer conocerla a través tuyo. Un saludo Manuel y feliz semana.
ResponderEliminarMuchas gracias, amiga.
EliminarSaludos.
Una grandísima obra de arte aunque por lo que nos dices algún restaurador metió bien metida la pata, eso que según nos dices bien pudo tirar de la obra de quien la realizo para ceñirse mas a la original.
ResponderEliminarLo que me parece una desgracia es que por el camino se perdieron alguna otra pieza.
Saludos.
Muchas gracias, Tomás.
EliminarUn saludo.
Such a talented, artistic family: Enrique, Antonio, Juan! They were goldmiths , painters, and created the monstrances.
ResponderEliminarGracias, amiga Duta.
EliminarAbrazos.
Manuel, my friend really very intersting information and beautiful photos!
ResponderEliminarWarm regards :)
Muchas gracias.
EliminarUn abrazo, Anna.
Una obra de arte impresionante esta custodia. Conozco la de Toledo que también es otra obra de arte magnífica. Saludos
ResponderEliminarMuchas gracias, Charo.
EliminarUn saludo.
Es una bella obra. Me gusto mucho. Te mando un beso.
ResponderEliminarGracias, Judit.
Eliminarbesos.
Cuánta maravilla comunicas, Manuel, y tan bien escrita. Memorable entrada, amigo.
ResponderEliminarAbrazo más que agradecido.
Muchas gracias.
EliminarUn abrazo, Carlos.
Me admmiro siempre de cuanta reliquias tienen allí, por eso España es bendecida y prevalecerá en la fe ...pese a todo Dios nunca olvida.
ResponderEliminarAbrazos, buena semana que queda aún.
Muchas gracias.
EliminarUn fuerte abrazo, amiga.
Hola, Manuel.
ResponderEliminarLe has dado al tema todo lo que necesitaba para transmitirnos la emoción que debéis sentir
los sevillanos cada vez que os situáis ante tal obra.
Más de tres metros, dices que mide. Casi nada.
Qué tiempo debió tardarse en realizar algo así?
Enhorabuena.
Muchas gracias, Ana.
EliminarUn abrazo.
Una obra de plata absoluta y totalmente impresionante que preside la Sacristía Mayor de nuestra Catedral y que pronto veremos en las calles bajo el sol sevillano.
ResponderEliminarUn post maravilloso junto al anterior al que engrandece y complementa.
Besitos
Muchas gracias.
EliminarBesitos van, amiga Isabel.
Sempre belli e interessanti i tuoi post, le fotografie in bianco e nero sono sempre stupende, complimenti.
ResponderEliminarBuona giornata.
Muchas gracias.
EliminarUn saludo, amigo.
La custodia de Juan de Arfe, de la catedral de Sevilla, es una de las más hermosas de España junto con la de Toledo, como no podía ser de otra manera. Un año, precisamente en 1992, tuve la inmensa fortuna de poder ver la procesión del Corpus sevillana. Más de una hora de cortejo impresionante con las calles adornadas para el evento. Una maravilla.
ResponderEliminarUn saludo
Gracias, Carmen.
EliminarUn saludo.
Te agradezco muchísimo el consejo que me das y que yo no había caído, es cierto que Piedad bien se merece que se escriba el texto fuera de la imagen, bueno a ella porque la conozco pero se lo merecen todos los invidentes. Saludos
ResponderEliminarMuchas gracias, amiga.
EliminarUn saludo.
Veo que en Sevilla también tienen una magnifica Custodia. Ya sabes que la de Toledo, que es la que yo he visto, es muy
ResponderEliminarbonita y también la de Granada. En fin, que tenemos maravillosas Custodias a lo largo de toda España.
Un abrazo amigo.
Muchas gracias, María.
EliminarUn abrazo.
Las custodias siempre mechan parecido una de las obras de orfebrería más hermosas. De niño uno se emocionaba observar al cura sacar de su caja la custodia por su brillo mágico. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarMuchas gracias, amigo Carlos.
EliminarUn fuerte abrazo.
Querido amigo te felicito por esta entrada, esta genial.
ResponderEliminarQue tengas un bello dia
Abrazos y te dejo un 💋
Gracias, amiga Liz.
EliminarAbrazos y beso para allá.
Mira que la habré visto veces, pero creo que no con el detenimiento que merece la Custodia de Sevilla. La próxima vez seguro que me fijo más gracias a tu completa entrada. Gracias por traerla aquí, un abrazo, amigo.
ResponderEliminarMuchas gracias, amigo.
EliminarUn abrazo.
Hola, Manuel. Hay que invitar a que conozcan in situ, esta impresionante custodia.
ResponderEliminarVeremos a ver qué nos depara el futuro, dentro del arte de la orfebrería.
Feliz miércoles. Bstes.
Muchas gracias.
EliminarUn besito, Emma.
Gli orafi sono dei grandi artisti che sanno creare opere d'arte , come l'Ostensorio di Cordoba , bellissimo !!! Un caro saluto.
ResponderEliminarGracias, Mirtillo.
EliminarUn saludo.
Querido amigo, espectacular obra, para admirar y recrearse con tanta belleza
ResponderEliminarGRACIAS, por las reseñas que nos dejas, una entrada maravillosa y completa.
Te deseo un hermoso día mi querido amigo.
Cariños y besos
Gracias, amiga Noemí.
EliminarBesos.
Uma obra lindíssima, Manuel!
ResponderEliminarObrigada por partilhar tamanha sabedoria!
Gratidão!
Beijinhos!
💖💖💖Megy Maia
Gracias, Margarida.
EliminarBesos.
Una joya plateresca maravillosa. Verla procesionar tiene que emocionar amigo.
ResponderEliminarBuen jueves Manuel.
Un abrazo.
Gracias.
EliminarUn abrazo, Laura.
Una joya maravillosa. Ya me hubiera gustado conocerla en mis tiempos en Andalucía.
ResponderEliminarNadie mejor que tú, Manuel, para contarnos las bellezas de esa tierra a la que tanto amo.
No sabes como te lo agradezco.
Este rinconcito tuyo, se ha convertido para mi en un lugar especial para volver al sur.
Un abrazo en la distancia.
Muchas gracias, amiga.
EliminarUn fuerte abrazo.
Esta festividad del Corpus Christi dedica a honrar el Sacramento de la Eucaristía, en procesión a 60 días después del Domingo de Pascua por las calles y plazas de Sevilla, alfombrada con plantas como el romero, para mí es una de las más bonitas que aún perdura en mis recuerdos de cuando vivía en Sevilla; por todo ello amigo Manuel, como siempre es un placer visitarte y leerte, es abrir la llave de mis recuerdos de ese tiempo tan feliz que viví en esa bendita tierra.
ResponderEliminarUn gran abrazo y mil gracias por compartir!
Muchas gracias, Enca.
EliminarUn fuerte abrazo.
Querido amigo, bellísima obra, siempre es un placer visitarte.
ResponderEliminarCariños y besos Manuel, que tengas un hermoso día
Muchas gracias, amiga.
EliminarBesitos van.
Gracias por la historia sobre un artista maravilloso, Manuel. La historia de la joyería es interesante.
ResponderEliminarGracias, amiga.
EliminarSaludos.