La Plaza del Triunfo, en Sevilla.

Plaza del Triunfo, de Sevilla.

A las diez de la mañana del día 1 de Noviembre, de 1755, Sevilla y provincia sufrió un pavoroso seísmo, conocido popularmente como el "Terremoto de Lisboa". Las consecuencias fueron terribles, ya que ésta fue la ciudad donde más repercusión tuvo, y aunque solamente perecieron seis personas, cayeron muchos edificios y partes de las iglesias de la ciudad. En la Catedral mientras el canónigo D. Pedro Manuel de Céspedes, se hallaba celebrando el Santo Sacrificio, llovieron piedras de sus bóvedas y cayeron pilares de lo elevado de su torre, sin que nadie saliera lastimado. Don Pedro, continuó con la misa rezada con las pocas personas que permanecieron en el templo. Mientras tanto, el Cabildo y el pueblo asustados se habían congregado delante del edificio de la Lonja, y se dispuso se celebrara allí una misa rezada para lo cual se improvisó un altar ante el costado del citado edificio que mira al Levante, y después se cantó el "Te-Deum", y se hizo una procesión alrededor de la plaza.
En honor y perpetuo agradecimiento a María Santísima, mandaron los ilustrísimos señores Dean y Cabildo, erigir un monumento del Triunfo, en el mismo sitio que se dijo la misa, aquel día.
De aquí le viene el nombre del Triunfo, a esta Plaza, que antiguamente fue conocida como la vieja Plaza de los Cantos - denominada así por haberse almacenado en ella las piedras para construir la Catedral-; después, El Corral de los Olmos; Plaza del Hospital del Rey y Plaza de la Lonja. Como veremos a continuación en un dibujo de Richard Ford, la plaza era totalmente diáfana, y no fue hasta 1845, cuando se reformó y remodeló urbanísticamente, sembrándole acacias, naranjos y limoneros. y se inauguro oficialmente en 1847. 

La Plaza del Triunfo.
Litografía de Luis Mariani, sobre dibujo de Joaquín Guichot. 1860
Álbum Sevillano, C. Santigosa.

A la derecha el monumento del Triunfo, y al fondo, el Alcázar.

Fachada del Alcázar a la Plaza del Triunfo.
Dibujo de Richard Ford 1832.

En este interesante dibujo vemos la muralla del Alcázar que da a la plaza del Triunfo con las primitivas casas a ella adosadas, y que fueron suprimidas, dejando al descubierto la muralla. En la torre del centro vemos un balcón, desde el cual la ilustre poetisa Fernán Caballero podía contemplar la Ciudad, durante los años que ocupó esa estancia del Alcázar.

Vemos en esta fotografía, el mismo lienzo de muralla, que en el dibujo anterior, de Richard Ford, ya sin las casas adosadas a la misma. Fotografía de 1898, antes de la instalación del monumento a la Inmaculada. (Próximamente publicaré una entrada especial sobre este monumento).

Fotografía donde vemos el resto de muralla, enfoscada y pintada, que falta a la izquierda de la fotografía anterior, es de finales del siglo XIX y nos muestra la entrada al Patio de Banderas desde la Plaza del Triunfo, perteneciente al Real Alcázar. Dos faroles adornan la entrada. A la izquierda, un viejo edificio que fue derribado y que ocupaba el lugar de la actual calle Joaquín Romero Murube, que fue uno de los promotores de que se derribara la casa, para liberar la muralla palatina.

En primer plano, la Diputación, y a su derecha la Casa de los señores Irureta-Goyena, donde se trataban aguas azoadas y oxigenadas, y que como he dicho anteriormente fue derribada.

Anuncio de la época donde se dice, que en ese establecimiento, que permanecía abierto todo el año, se trataban las enfermedades del aparato respiratorio. con inhalaciones de ázoe, oxígeno y ozono, solos o con balsámicos o antisépticos. También se daban baños de aire comprimido e inyecciones hipodérmicas de oxigeno, todo bajo la dirección del médico: C. Voisins.

Foto: (gelatinohaluro, estereoscópica) de 1904.

Mujer en la Plaza del Triunfo con la puerta principal de la Diputación de fondo.

Fotos de Lucien Levy. 1883.

Foto. Lucien Levy de 1883. Parte de la plaza ya ajardinada.

Postal 1902.

Postal 1905.

Postal, principios del siglo XX.

Postal. Plaza del Triunfo. Segunda década del siglo pasado.

En esta interesante fotografía aérea de 1928, se observa  como toda la zona comprendida entre la Plaza del Triunfo y la de la Virgen de los Reyes  se llevó a cabo una total transformación con motivo de la Exposición Iberoamericana. Vean como la Plaza del Triunfo está totalmente diáfana, con tan solo el Monumento a la Inmaculada, y en la Plaza de la Virgen de los Reyes se daba comienzo a la fuente de José Lafita que se inauguró al año siguiente.

Fuentes: Bibliografía y archivo particular.

La Plaza del Triunfo, en la actualidad. 

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