jueves, 19 de junio de 2014

Leal Real Cuerpo de Monteros de Espinosa, Real Cuerpo de Alabarderos, La Escolta Real y Carrozas Reales.

Guardia personal del Rey
Leal Real Cuerpo de Monteros de Espinosa,
Real Cuerpo de Alabarderos,
La Escolta Real,
y
Carrozas Reales.
Año 1902
Leal Real Cuerpo de Monteros de Espinosa
Tres son las corporaciones o instituto que constituyen la guardia personal del monarca de España; El Real Cuerpo de Monteros de Espinosa, el Real Cuerpo de Alabarderos y el Escuadrón de la Escolta Real. Vela el primero por la seguridad del Rey en las habitaciones privadas que ocupa éste en palacio; monta el segundo la guardia en las escaleras, galerías y salones del regio alcázar ; escolta el último a las personas reales cuando salen a la vía pública para las solemnidades oficiales o los actos de Corte.
***
Los Monteros de Espinosa fueron instituidos por el Conde Soberano de Castilla Sancho García en 1013, y la leyenda popularizada por el gran poeta Zorrilla, cuya certidumbre niegan muchos historiadores, atribuye al hecho siguiente la creación de ese instituto.
La condesa viuda doña Oña (según la leyenda), madre de Sancho García, se enamoró del musulmán Almanzor, huésped entonces de Sancho e instigada por su amante, intentó envenenar a su hijo durante un festín. El mayordomo del Conde Sancho Peláez, advertido de la trama, impidió que Sancho García apurase la copa fatal, y el agradecido Conde le confió desde entonces la guardia de su persona.
Era el citado Peláez un hidalgo natural de la villa de Espinosa, en la provincia de Burgos, y los doce hombres que bajo su mando formaron la guardia personal de sancho García se eligieron también entre vecinos de aquella villa o de los lugares de su jurisdicción, como Barrueca, Quintanilla, Barcenas, Santa Olalla, Iguaseras y Para, habiendo quedado de precepto el que los Monteros de Cámara o Guardas, según también se les denomina, sean precisamente naturales de los mencionados sitios.
El Rey Católico añadió, primeramente otros doce Monteros a los doce que instituyo Sancho García, destinándolos a la guardia de su hijo el príncipe D. Juan, y después aumentó otros veinticuatro para el servicio de la reina doña Juana cuando ésta se retiró a Tordesillas. Felipe II les confirmó sus privilegios e institutos, y el primer Borbón les concedió el uso de la dragona, y doña Isabel II el de la placa que lucen en sus uniformes.
En la actualidad prestan servicio doce Monteros de Espinosa, o sea el mismo número de la época de su fundación, y guardan a los reyes desde las nueve de la noche hasta las siete de la mañana, velando en las habitaciones contiguas a las que ocupan aquellos. Cuando muere el rey o alguna persona real, guarda día y noche su cadáver y no lo abandonan hasta que recibe sepultura. Disfrutan de un sueldo de tres mil pesetas anuales (1902) y están sujetos a las ordenanzas y mandatos del Montero Mayor del rey, rigiéndose el Cuerpo por las ordenanzas formadas en Valladolid en 1º de Octubre de 1557.
Real Cuerpo de Alabarderos
Entrando en Palacio para prestar servicio.
Zaguanete de Alabarderos con uniforme de gala.
Después del relevo de la guardia.
Banda de música del Real Cuerpo de Guardias de Alabarderos, de 1892.
Banda del Real Cuerpo de Alabarderos de 1927, dirigida por el maestro Vega, daba conciertos en provincias, obteniendo grandiosos éxitos.
El brillante Cuerpo de Alabarderos tiene también larga y gloriosa historia, puesto que fue instituido en 1504 por Fernando el Católico. Este poderoso y sagaz monarca nombró capitán de la guardia de Alabarderos a su cronista Gonzalo de Ayora, de quien dice Fernandez de Oviedo que era hombre diestro en las armas, perfecto soldado, hidalgo, docto y buen orador.
Ayora organizó la Guardia de Alabarderos que capitaneaba con cincuenta hombres, , armados de alabardas y espadas, siendo por algunos designada esta fuerza con el nombre de Guardia Española.
Los individuos que a ella pertenecían tenían que ser cristianos viejos, sin antecedentes penales (requisito que también se exige ahora), de buen crédito y de elevada estatura.
Felipe II le otorgó varios privilegios, y en 1707 dictó una real orden Felipe V reuniendo las tres compañías de Alabarderos viejas y de la Lancilla en una sola con el nombre de Guardia de Alabarderos, compuesta de cien hombres. Se aumentó más adelante su número a doscientos, confiándole el servicio interior de Palacio.  Verificada la Restauración, se reorganizó el Real Cuerpo de Alabarderos, reglamentándolo por decreto el 6 de Agosto de 1875.
Es coronel del Cuerpo S. M. el Rey, y actualmente comandante general de Alabarderos el teniente general de ejército D. Juan Pacheco; segundo comandante el general de división D. Vicente Martitegui, y secretario el coronel Sr. Vizconde de Bellver.
La Escolta Real
                            Uniforme de gala                          De diario
                           Regreso de la Salve          Uniformes de la Escolta
El escuadrón de Escolta Real fue instituido por real decreto de 19 de Abril de 1875, sucediendo, por el servicio que presta, a los guardias de Corps, creados en España en 12 de Junio de 1704, que fueron sustituidos posteriormente por el Cuerpo de Guardias de Real Persona (suprimido en 1821) y por el escuadrón de Guardias de la Reina (extinguido en 1854).
El Escuadrón de Escolta Real quedó organizado en julio de 1875, y desde entonces comenzó a prestar servicio, siendo su primer coronel el Excmo. Sr. don Pedro Girón y Aragón, duque de Ahumada.
Estuvo en la campaña carlista acompañando a S.M. el rey D. Alfonso XII, de operaciones en las provincias Vascongadas y Navarra, hasta la terminación de la guerra. Concurrió a las maniobras que se efectuaron en Burgos y Victoria, a las órdenes del rey D. Alfonso XII, en 1878, y diez años después marchó a Barcelona escoltando a la augusta madre de D. Alfonso XIII, que fue a la capital del principado para inaugurar la Exposición Universal.
Todos los años se traslada parte de la fuerza durante el veraneo de la real familia a San Sebastián.
El escuadrón consta de cien jinetes, cuyas armas ofensivas son sables de caballería y tercerola Maüser, y las defensivas casco y coraza de acero bruñido. El pueblo de Madrid está muy familiarizado con esta brillante fuerza, a la cual ve desfilar todos los sábados por las calles de la villa escoltando el coche que ocupa la Real Familia para ir a la Salve. En las grandes solemnidades de la Corte, como por ejemplo, la apertura del Parlamento, constituye también una nota a la par varonil y pintoresca el avance detrás de la carroza regia de los individuos de la Escolta, en cuya bruñidas corazas se reflejan los rayos del sol, mientras agita el aire las blancas plumas que forman los penachos de sus cascos. Esta Fuerza se distingue por su marcialidad y brillantez.
Carrozas Reales.
A fines del siglo XIX y principios del XX, cuando el lujo palatino se manifestó en su mayor esplendor lo mismo en España que fuera de ella, se construyeron y empezaron a usarse las actuales carrozas para las solemnidades y actos extraordinario de la Corte.
Todos los carruajes de gala que en esos días usa hoy la Familia Real de España, como son las carrozas llamadas de Corona Real, de Caoba, de Corona Ducal, de Concha, de Cifras, de Amaranto, de Bronce, etc., son de estilo Imperio; varias de ellas, construidas a fines del siglo XVIII en París por el maestro Gautier, y algunas por el afamado constructor Fernando Duran, que trabajaba en Madrid por la misma época.
Describiremos únicamente la carroza que suelen ocupar SS.MM., y que se conoce con el nombre de coche de la Corona Real. Es de madera negra adornado con profusión de atributos y motivos en bronce dorado a fuego, figuras en bajo y alto relieve. En las portezuelas hay un grupo de dicho metal, en el cual está representadas las nueve Musas, y en el centro el Dios Apolo. En la parte superior de las portezuelas, dos leones sostienen los escudos de las casas de Borbón y de España, rematados por dos coronas reales.
Sobre la techumbre, en el centro, tiene una corona real encima de dos mundos de bronce dorado. El interior de la carroza está vestido de terciopelo rojo, con asuntos diversos bordados en seda de de colores; el bordado del testero reproduce con gran fidelidad y perfección la Bahía de Cádiz.
Los alzavidrios son de seda y están rematados por gruesos borlones de oro.
Esta carroza fue construida por el maestro Julián González, en Madrid en el año 1832, para el rey Fernando VII, y desde entonces es la que sirve, como anteriormente decimos, para conducir a los Reyes en actos solemnes.
El tiro lo componen ocho caballos tordos españoles, empenachados, con primorosas guarniciones y rendajes adornados de escudos, hebillas y aplicaciones de bronce dorado. Sirven el carruaje un cochero, un postillón, dos lacayos y cinco o seis mancebos.
Aparte de las carrozas anteriormente citadas, posee la Casa Real el coche impropiamente denominado de Doña Juana la Loca, que es una verdadera joya artística.
Este carruaje figuró en la cabalgata organizada con motivo del Centenario de Colón a título de obra de arte, pero no se exhibe nunca en las comitivas regias, porque a pesar de las muchas restauraciones que ha experimentado, no ofrece suficientes garantías de solidez, a causa de los muchos años que tiene de existencia.
Fue construido, con efecto, a fines del siglo XVII, y su caja es de madera imitación de ébano, con preciosas figuras, flores y atributos en relieve, que ocupan toda la la superficie de los tableros y adornan el frente, el testero y las esquinas.

Si desea ver otros temas relacionados con el Rey Alfonso XIII, por favor haga clic: AQUÍ.

50 comentarios:

  1. Me ha congratulado saber de esto, un abrazo!

    ResponderEliminar
  2. Interesante artículo referido a los cuerpos reales. Parece que nos hayamos puesto de acuerdo pero era lo lógico en un día tan señalado.

    http://sietemerindades.blogspot.com.es/2014/06/viva-sm-el-rey-de-espana.html

    Un saludo. Lebato.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias Lebato; es un trabajo que tenía preparado hace casi dos años, y que nunca veía la oportunidad de publicarlo, así que aproveché el paso del Pisuerga por Valladolid, y ahí está. Así que es normal esta coincidencia.
      Saludos.

      Eliminar
  3. Una buena lección de historia.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  4. Hola Manuel.
    Una entrada doblemente interesante, por su contenido histórico artístico, como por su actualidad, también, histórica en el día de hoy. Magnífico, como es habitual.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  5. great post:)
    please visit me in free time
    http://mesmerize87.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  6. ¡Magnífico Manuel, como siempre!

    Realmente interesante y ameno.

    ¡Un beso!

    ResponderEliminar
  7. Hoy me pongo al corriente del cuerpo real aunque me imagino que no habrá cambiado mucho actualmente.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  8. Muy buen trabajo e interesante. Felicidades.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias, Hugo.
      Un saludo.
      Y voy a aprovechar para pediros disculpas a todos, por tardar tanto en agradecer vuestro comentarios; he tenido el ordenador averiado casi una semana.

      Eliminar
  9. Especialmente indicado para la fecha en que ha sido proclamedo, S. M Felipe VI.
    Ni en las enciclopedias hay un registro tan riguroso, y amplio como éste y añado una cronólogia artística y creativa que es toda una magnifica lección de Historia.
    Una verdadera gozada tus páginas, Manué.

    Un fuerte abrazo.

    Mari Carmen.

    ResponderEliminar
  10. Impresionante leccion MAnuel. Admiro tu capacidad de documentacion.
    Besitos

    ResponderEliminar
  11. Estimado Manuel: Excelente reportaje bien documentado,y en estos momentos históricos, recuerda tiempos pasados.
    Gracias por compartir!!!.
    Un abrazo Afl

    ResponderEliminar
  12. Impresionante documento Manuel, y muy adecuado en estos días. La verdad es que me ha encantado leerlo porque la mayoría de los datos que reflejas los desconocía. Gracias amigo, haces un gran trabajo. Paso por aquí también para despedirme por las vacaciones, así que un fuerte abrazo, feliz verano y hasta Septiembre.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Pepe por todo, e igualmente te deseo, una felices vacaciones en unión de tus seres queridos, que seguro merecido lo tenéis.
      Un fuerte abrazo.

      Eliminar
  13. MUY BUENO CONOCER LA HISTORIA DE TU PAÍS.
    UN ABRAZO

    ResponderEliminar
  14. Sencillo de leer, enterarme como siempre de los momentos de la historia de tu país, tuve la oportunidad como todo el mundo, imagino, de ver la proclamación del nuevo rey de España, la vestimenta impecable, espero tengan mucha suerte :* un abrazooo

    ResponderEliminar
  15. Es muy especial conocer tanta historia, imágenes artísticas, realmente haces un trabajo excelente.
    Gracias, un abrazo.

    ResponderEliminar
  16. Manuel estimado amigo, que puedo decir que no te hayan dicho. Es magmífico lo que nos ofreces para enriquecimiento de nuestro hacer.
    Un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
  17. Tú como siempre tan bien documentado, que gusto da leer historia contigo, siento no poder pasarme más a menudo!

    Feliz entrada de verano

    Un cordial saludo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias y no te preocupes, por que estamos todos iguales con la falta de tiempo.
      Saludos.

      Eliminar
  18. Bellissimi documenti storici, complimenti

    ResponderEliminar
  19. Siempre he sentido curiosidad por visitar el Museo de Carrozas del Palacio Real pero por unas cosas u otras aun no he podido. Esta entrada tuya a acrecentado mi curiosidad mas si cave. Un abrazo, Manuel.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola David, te digo por si algún día decides dar una vuelta por Sevilla, que aquí tenemos otro museo de carruajes, en un bello edificio que es el Convento de los Remedios.
      Gracias y un abrazo.

      Eliminar
  20. hermosas fotos.

    Gracias por visitar mi Blog =)

    ResponderEliminar
  21. De nada Bell, ha sido un placer.
    Besos.

    ResponderEliminar
  22. Magnífica información.

    Perdona el retraso pero es que tengo malita a mi madre.

    Un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
  23. Amalia, de perdone nada, todo lo contrario, muchas gracias.
    Lo importante es que se recupere pronto tu madre, y siempre con ella, que madre nada más que hay una, y seguro que han pasado gran parte de su vida al cuidado de nosotros.
    Un beso para las dos.

    ResponderEliminar
  24. Hola Manuel:

    Cuando muy bien comentas que el mayordomo Sancho Peláez era natural de la villa de Espinosa, -creo así y corrígeme- te estás refiriendo al pueblo de Espinosa de los Monteros en Burgos; de ahí, su actual nombre, denominado así, quizá por eso de que el personaje Peláez, Montero de la guardia personal del conde era de la villa de Espinosa. Y entonces puedo pensar también que Oña, hoy como pueblo, antes sería el famoso condado de los Sres. de Oña, -por lo del nombre de su madre- y si fuera así, justo en frente de la iglesia, está su efigie; la de un conde con unos fueros en la mano. Puedo pensar entonces, que esa figura podría representar al mismísimo conde Sancho García, al que muy bien has relatado y que llamaban el de los buenos fueros.
    Si ésto es así como lo pienso, me has proporcionado una importante visión histórica y ya sé un poco más de esos pueblos de Burgos, como Frías por ejemplo, que más tarde también fuera ciudad, nombrada por el rey Juan II de Castilla y adjudicada al conde de Velasco a cambio de Peñafiel.
    Bueno Manuel, no pienses que soy historiador, todo lo contrario, aunque me gusta la historia y sus raíces y tu blog sin duda alguna lleva consigo un importante documental fotográfico e ilustrativo. Un placer visitarte. Gracias también por tu comentario en mi blog.

    Te envío un abrazo. Juan

    ResponderEliminar
  25. Muchas gracias Juan, comentarios como el tuyo son los que enriquecen este humilde blog.
    Te comento que este trabajo lo hice en el 2012, aunque no lo publiqué hasta el 2014, por lo que recuerdo pocos datos. Lo del pueblo si te puedo confirmar que era Espinosa de los Monteros, ahora bien, del resto seguro que es como tu dices, ya que veo que estás muy bien documentado.
    Gracias y he aprendido mucho de tu generoso comentario.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  26. Una interesante muestra de todo lo que acompañó el reinado de un para mí nefasto rey de España.
    Un post muy bien elaborado.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar

  27. D. Manuel, me gustaria poder hablar con Vd. sobre el tema de los Monteros de Espinos.
    Rogaria que se pusiese en contacto conmigo a nivel personal o que me facilite su correo y lo haria yo.
    muchas gracias
    Frank Castello

    ResponderEliminar
  28. Hola de nuevo, Frank. Te comento, que no suelo poner mi correo aquí, y más si la persona que me lo solicita me escribe como anónimo; pero, podemos hacer una cosa si te parece bien,que en otras ocasiones lo hemos hecho, escríbeme tu correo, que como tengo activada la moderación en los comentarios, yo no lo haré público, y de inmediato me pongo en contacto contigo.
    Un saludo.

    ResponderEliminar