"La Ciudad de Sevilla".
Este gran establecimiento, honra de Sevilla y orgullo de España, fue fundado en 1891 por D. José Casquero, hombre decidido, inteligente y laborioso, verdadero paladín del trabajo, quien con su intervención personal, primero, y después -retirado ya- con sus acertados consejos, llevó a esta Casa al envidiable estado de prosperidad y sólido prestigio.
El Sr. Casquero, socio comanditario de este establecimiento, que en sus inicios giraba con la razón social "Casquero y Compañía", y dos décadas después lo hacía como "La Ciudad de Sevilla" (La Hera y Compañía S. en C.) pero, aunque su intervención en esta segunda época fuera pasiva, él fue quién conquistó para esta Casa el envidiable renombre de que disfrutó durante muchas décadas.
Anuncio de la Ciudad de Sevilla, de 1892.
Vista exterior de los importantes almacenes "Ciudad de Sevilla", la esquina que vemos en la imagen , era la situada entre la calle Franco y la calle Agujas. 1913.
Anuncio de 1912.
Departamento de venta al por mayor. Una vista parcial de la sección de géneros estampados. 1913.
Vista parcial de los talleres de la sección de confecciones que dirigía una afamada modista francesa. 1913.
Departamento de venta al detall en la sección de pañería.
Departamento de venta al detall, en las distintas secciones de sederías, lanerías y otros artículos de gran moda y alta novedad para señoras. 1913.
Una sección de artículos blancos en los almacenes de venta al por mayor. 1913.
Salones y gabinete de pruebas de la casa de confecciones "Ciudad de Sevilla". 1913.
Uno de los salones de exhibición de modelos.
Ocupaba "La Ciudad de Sevilla" extensísimos locales, con entradas por las calles Aguja (hoy Blanca de los Ríos) 1 y 4; en el número 1, compró el Comercio de telas del siglo XIX, de D. Gregorio Soto y Cia. quien tenía un pasaje interior a la calle Francos, donde "La Ciudad de Sevilla" ocupaba los locales del 16 al 24; y en el número 4 de la misma calle, adquirió también la Fábrica de molduras, ornamentos y aparatos para templo, que tenía allí D. Antonio Muñiz y Crespo, que miraba a la Plaza del Salvador, y hacía esquina con la calle Álvarez Quintero, donde ocupaba dicho establecimiento, los locales números 7, 9, 13 y 15. Además de sus grandes almacenes al por mayor y al detall, de novedades en tejidos nacionales y extranjeros, se dedicaba, con especialidad a la confección de vestidos para señoras y niños; a la de ropa blanca, equipos y canastillas. Además de ofrecer también, vestidos y sombreros para señoras, preciosos modelos, adquiridos en exclusiva en las más afamadas Casas de París.
Escaparate de la sección de confecciones. 1916.
Otro escaparate de la misma sección. 1916.
Vista parcial de la sección de sastrería. 1928.
La sastrería para caballeros, disponía de tres cortadores, seleccionados entre los mejores del oficio, y de más de cien operarios de ambos sexos.
Detalle de uno de los Talleres donde se confeccionaban las prendas que hacían famosa a la mujer sevillana. A la derecha, una de las modelos de "La Ciudad de Sevilla". 1928.
En la parte superior izquierda, Don José Casquero, fundador de la "Ciudad de Sevilla", comanditario de esta importante casa. En el centro, jefes y dependientes de esta empresa. 1928.
En las secciones de confección para señoras, bordados y ropa blanca, entre las que trabajaban en los talleres de la Casa, y las que lo hacían en sus domicilios, daba ocupación "La Ciudad de Sevilla" a 350 mujeres, y para la dependencia que trabajaban en el mostrador y en los escritorios, disponía de unos 100 empleados más.
Notas del editor:
Apuntados, si bien muy a la ligera, los precedentes datos en el presupuesto de gastos que precisaba, solo para personal, "La Ciudad de Sevilla"; contando que algunos dependientes especializados, en esa época, tendrían de sueldos entre ocho a diez mil pesetas. Y añadiendo a este capítulo los no menos importantes de jornales, alquileres, contribución, etc., se saca la consecuencia -si la lógica no ha emigrado de este mundo- de que las ventas de esta próspera Casa, que diariamente realizaban, tendrían que ser fabulosas. Hoy en día tal número de empleados, en cualquier comercio del ramo que sea, es inimaginable, incluso comparándolo con muchas grandes superficies.
Fuentes: Archivo particular.
La calle Blanca de los Ríos (antigua Agujas), en tiempos del coronavirus. "La Ciudad de Sevilla" ocupaba toda la acera de la derecha que vemos en las imágenes siguientes.
Si haces clic sobre las imágenes, las puedes ver ampliadas.
Si quieres ir de compras por otras tiendas o calles de Sevilla, por favor, haz clic: AQUÍ.
Como nos dices es fácil que no existan ningún establecimiento similar al que nos has descrito.
ResponderEliminarSaludos.
Gracias, Tomás.
EliminarUn saludo.
I do appreciate the work which goes into showcasing your beautiful city and its history.
ResponderEliminarMuchas gracias.
EliminarUn abrazo.
Mi abuela nos hablaba de este prestigioso comercio sevillano. Yo era un comino cuando iba con mi madre a "Las 7 Puertas", aquellas sillas y mesas también las he visto en en tan emblemático comercio de la calle Puente y Pellón. Mi madre tenía su dependiente, entonces se compraban las ´sabanas, para hacer en casa, igual que los uniformes y baberos, teníamos una costurera fija en casa, nos hacía las cortinas y todo lo más variado de aquellos entonces...
ResponderEliminarElla me inculcó el entusiasmo por la costura.
Me has llevado de la mano a una Sevilla entrañable y a unos comercios que crearon escuela...
Magnifico trabajo y mi más entusiasta enhorabuena, "chapó".
Un beso.
Gracias, Mari Carmen.
EliminarUn beso.
Manuel, te dejo el enlace de mi nuevo blog:
EliminarGinesfranconettihavuelto.blogspot.com
Un beso.
Maravilloso post que he leído con deleite porque me encanta esa época y me encanta conocer estos detalles de la historia de nuestra ciudad. Junto con Ciudad de Londres y Pedro Roldán, Ciudad de Sevilla debió de ser espectacular.
ResponderEliminarBesitos
Muchas gracias, Isabel.
EliminarUn beso.
Muy interesante Manuel, me ha encantado conocer estos recuerdos de Sevilla. Gracias y esperando la siguiente. Abrazos.
ResponderEliminarGracias, Teresa.
EliminarUn abrazo.
Que hermoso edificio que al verlo así con esos escaparates resulta tan entrañable con el paso del tiempo. Elegancia y prestigio parece el resultado de la “Ciudad de Sevilla” en aquella época, y que hoy día no creo que exista una cosa igual, todo ha sido sustituido por la frialdad de los centros comerciales.
ResponderEliminarMe ha encantado esta entrada Manuel.
Un abrazo y buen día.
Muchas gracias, Elda
EliminarUn abrazo.
Como ha cambiado todo Manuel. Nada que ver con lo que hay hoy. Una entrada que bien merece este recordatorio. Las fotos me han recordado a la tienda con que mi abuelo empezó en Cáceres los Almacenes Mendoza.
ResponderEliminarBuen jueves. Cuídate.
Un abrazo.
Muchas gracias.
EliminarUn abrazo, Laura.
Me ha impresionado que ya en aquellos años hubiera un edificio comercial de tal envergadura y con tantos empleados.Saludos
ResponderEliminarMuchas gracias, Charo.
EliminarUn saludo.
Qué buenos tiempos!!.
ResponderEliminarAhora todo ha cambiado y, creo, que casi siempre a peor.
Me encantó esta buena historia.
Un fuerte abrazo.
Gracias.
EliminarUn abrazo, Amalia.
Visité, siendo niña algunos almacenes de Sevilla, en los que compraba mi padre. No consigo recordar como se llamaban, pero desde luego, por las fechas no puede ser este. Mi padre no había nacido tampoco en esos años. Sevilla ha sido un referente para los comerciantes.
ResponderEliminarBesos
Gracias, Antonia.
EliminarBesos.
Hola Manuel, Me encanta como te preocupas para regalarnos imagenes de aquellos tiempos y tanto conocimiento. Un día conoceré Sevilla. Un cariño para ti.
ResponderEliminarGracias, Soledad, y no dejes de visitarnos que no te arrepentirás.
EliminarUn abrazo.
Que fotos mas espectaculares de la bella y tradicional Sevilla.
ResponderEliminarSabes, querido Manuel : en Pereira, Colombia, adonde nací, la principal Industria por bastante tiempo en mis tiempos era la de la confección.
Te dejo un fuerte abrazo!!
Muchas gracias, Ricardo.
EliminarUn fuerte abrazo.
Buenas tardes Manuel, encantadora y emotiva entrada en recuerdo de unos tiempos pasados y que como bien dices distan mucho de los actuales en casi todos los sentidos. Una mediana empresa y la cantidad de trabajo que discurría a su alrededor, nada en comparación con el mundo actual. ¡Preciosa! La he leído como todas las demás con suma y total atención.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo Manuel y buen resto de semana.
Gracias, amigo, Juan.
EliminarUn fuerte abrazo.
Siempre aprendo de tus escritos, da gusto visitar este blog.
ResponderEliminarUn saludo.
Gracias, Carmen.
EliminarSaludos.
Que bonito lo que cuentas de Sevilla que estando lejos siento cerca al leerte. Saludos amigo Manuel.
ResponderEliminarMuy amable, amiga Sandra.
EliminarGracias, y te envío desde Sevilla, un fuerte abrazo.
Impresionante establecimiento Manuel
ResponderEliminarIncreíble la cantidad de trabajadores y trabajadoras.
Ciertamente eran otros tiempos.
Qué genial guardar la historia en fotos!
Mi duda es, o lo pasé de largo o no nos cuentas en qué año desapareció este inmenso negocio.
Que tengas un lindo fin de semana
Abrazo
Gracias, Lucía.
EliminarUn fuerte abrazo.
Qué buena divulgación amigo Manuel. Desconocía la existencia de estos importantes almacenes y tu publicación ha sido como un viaje en el tiempo. Como dice Elda que diferencia con los fríos centros comerciales de la actualidad.
ResponderEliminarGracias como siempre por tu trabajo.
Un fuerte abrazo.
Gracias, Miguel.
EliminarUn fuerte abrazo.
Hola que preciosas fotos siempre traen recuerdos me encantan que bien vestida lucían las personas. Saludos
ResponderEliminarGracias.
EliminarUn saludo, Nany.
La ciudad de Sevilla, especulo tuvo en principio ese nombre, porque la sociedad o negocio que emprendió don José Casquero, para la época, representaba un establecimiento monumental, como se observa en las fotos y en la narrativa que haces de lo que fue su movimiento fabril y su comercio: producción y ventas de ropa y textiles al detal y al por mayor. Asumo, Manuel, que los centros comerciales, se le quedan en pañales a esta empresa de La ciudad de Sevilla. Un abrazo desde mi cubil colombiano, con gran aprecio.
ResponderEliminarCarlos
Muchas gracias.
EliminarUn abrazo, Carlos.
Uy, Manuel que maravillosa entrada. Ilustrada con estupendas fotografías. Impresionantes almacenes de aquella época. Me has llevado de la mano por esas calles con un encanto especial llenas de pequeñas y grandes tiendas en los largos años que viví en mi amada Sevilla.
ResponderEliminarEs un lujo tenerte de cronista con ese enorme trabajo de documentación y divulgación.
Muchas gracias querido amigo.
Maripaz, las gracias siempre a ti.
EliminarUn fuerte abrazo.
¡¡Que distintos se ven ahora los escaparates, las ropas y todo!!. Sevilla ha sido y será siempre preciosa, aunque cuando yo estuve, hacía un tremendo calor, pero valido la pena.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias.
EliminarUn abrazo, María.
Madre mía, Manuel, a mí esos comercios me chiflan, pero ya no quedan, los centros comerciales al uso han ido acabando con estas joyas. Una historia muy interesante e ilustrada con hermosas fotografías.
ResponderEliminarEn Madrid todavía quedan algunas calles con tiendas de telas y abalorios, y a mí me encanta curiosear, aunque lo más que he confeccionado es un vestido para las muñecas pero cosido y cortado a ojo, pues eso del Corte y Confección nunca se me dio del todo.
Como siempre he disfrutado mucho y he aprendido un poco más sobre la rica historia de tu ciudad.
Un abrazo,
Gracias, Tesa.
EliminarUn abrazo.
Qué tiendas aquellas, de alto copete y mejores precios y calidad, onde las señoras y los señores acudían a comprar para lucir su smejores galas en saraos y en los paseos por el Parque de Mª Luisa. Nada que ver con la compra on line de hoy día.
ResponderEliminarUn saludo
Gracias, Carmen.
EliminarSaludos.
Hola Manuel. Es impresionante el reportaje sobre La ciudad de Sevilla.Me ha encantado saber con tanto detalle todo lo referente a estos famosos almacenes que daban trabajo a tantas familias.
ResponderEliminarMuchas gracias por compartir tu sabiduría
Un abrazo
Muchas gracias.
EliminarUn abrazo, Carmen.
Molto interessante questo post sullo stabilimento "La cittàdi Siviglia" ! Mi sono piaciute le foto di tempi molto lontani, che ci mostrano come si sono evolute la moda e il costume del tempo. Io non conosco ilposto ma credo che sia stato uno stabilimento con prodotti di alta qualità, per le signore del tempo. Saluti.
ResponderEliminarGracias, Mirtillo.
EliminarUn abrazo.
Gracias Manuel por compartir estos recuerdos e imágenes tan hermosas de Sevilla.
ResponderEliminarCuantas cosas echamos de menos, sobre todo esos comercios, esas tiendas familiares, aquí en mi tierra esta Platería, y estaba llena de esas hermosos comercios, ahora queda algo, pero nada como antes, cuanta nostalgia.
Un abrazo y feliz finde.
Gracias, Carmen.
EliminarUn abrazo.
Que reportaje más preciso y documentado sobre algo que comenzó hace años, las fotografías son impresionantes, se las ve como una tienda de lujo de las que había en Paris. También el texto que acompaña a las imágenes es una recopilación tan real que parece que sea unos almacenes que estén así.
ResponderEliminarEres un gran investigador, un periodista de sucesos pasados y presentes genial, mis felicitaciones Manuel.
Con cariño un abrazo.
Muya amable, Ángeles.
EliminarGracias, y otro cariñoso abrazo para ti.
Olá, Manuel!
ResponderEliminarTanta pesquisa sobre esse grande estabelecimento de Sevilha, resultou numa excelente publicação.
Lisboa também teve grandes estabelecimentos onde tudo se vendia. Hoje nenhum existe e os belos edifícios são agora centros comerciais ou hotéis. A baixa da cidade perdeu o glamour de antigamente.
Um abrazo, cuídate.
Gracias, teresa.
EliminarUn fuerte abrazo.
¡Hola, Manuel!
ResponderEliminarBella Sevilla, no pierdo la esperanza de conocerte un día.
Mientras tanto quedo cautiva con tu hermoso recorrido. Recónditas y añejas callecitas que me invitan a soñar.
Gracias por compartir tan didáctico y educativo post.
Un fuerte abrazo desde Perú. 🇵🇪
Gracias, Nuria, y a ver si te animas algún día, que por aquí estaremos si Dios quiere.
EliminarUn fuerte abrazo.
Hey dear! i loved the post and already followed your blog! I want invite you to visit and follow mine back ! <3
ResponderEliminarwww.pimentamaisdoce.blogpost.com
Muchas gracias.
EliminarUn saludo, Pimienta.
Que maravilloso post Manuel, cuanto trabajo daban lugares como este. Es muy muy interesante. Muchas gracias. Un fuerte abrazo y cuidaros mucho.
ResponderEliminarGracias, Lola.
EliminarUn fuerte abrazo.
¡Hola Manuel!
ResponderEliminarNos muestras un precioso post con todo lujo de detalles de tu Sevilla antigua. Has hecho un buen trabajo, gracias por compartirlo. Me encantan esas fotos antiguas en blanco y negro.
Un abrazo y bendiciones, junto a mi gratitud por tu huella.
Buen fin de semana.
Muchas gracias.
EliminarUn fuerte abrazo, amiga Marina.
Me ha encantado el reportaje, Manuel y también las fotos. Es que me gustan mucho las fotografías antiguas: esos techos tal altos y esos marcos sujetos también al techo, los escaparates con esos maniquíes... las poses de los trabajadores...
ResponderEliminarUn fuerte abrazo :)
Gracias, Gumer.
EliminarUn fuerte abrazo.
Muy interesante tu entrada, está llena de recuerdos de otros tiempos, ahora me doy cuenta de que los años pasan demasiado rápidos.
ResponderEliminarTengo la sensación de que fue ayer cuando visitaba con mi madre las tiendas de tejidos, me encantaba ver telas e idear modelos con ellas, a mí me gustaba llevar lo que no llevaba nadie, era yo la que me encargaba de dibujar lo que que me quedaría bien y fuese original.
Hoy parece que aquellas tiendas han desaparecido, ya nadie cose y todo se compra confeccionado.
Cariños.
kasioles
Gracias, Kasioles.
EliminarUn abrazo.
Awesome article guys :)
ResponderEliminarGracias, Gannis.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias.
ResponderEliminarUn cordial saludo.
Estou sempre a aprender por aqui! Absolutamente notável, um negócio com tal dimensão para a época!
ResponderEliminarGrata por mais uma publicação incrível, e muito bem documentada!
Um grande abraço!
Ana
Muchísimas gracias, Ana.
EliminarUn fuerte abrazo.
Muchas gracias por este trabajo, Manuel.
ResponderEliminarLlevo mucho tiempo buscando cosas sobre la Ciudad de Sevilla porque mi abuela (y otras mujeres de mi familia: alguna de sus hermanas y sobrinas) trabajaron allí, era modista. Intento buscar cosas sobre las trabajadoras, cómo eran los contratos y algunas curiosidades.
Ella contaba que cosían para mujeres de familias destacadas de la ciudad y no podían copiar los modelos que realizaban para ellas.
Muchas gracias, me ha hecho mucha ilusión encontrar este artículo.
Las gracias siempre a usted, por su visita y comentario, y me alegro mucho de que le haya gustado esta entrada.
ResponderEliminarDel personal no tengo nada, pero, si tengo facturas de muchos comercios sevillano que en su día publicaré y puede que haya algo de este comercio; lo que sucede es, que hasta que no termine con un proyecto que estoy llevando a cabo de la mayoría de los pueblos de Andalucía, y del que me queda por lo menos un año para terminarlo, no podré publicar lo dicho.
Un cordial saludo.