Casa de Pilatos.
En el mes de Octubre de 1521, D. Fadrique Enriquez de Ribera a su regreso de Jerusalén, mandó a activar las obras de su Palacio, llamado Casa de Pilatos, y Tanto celo pusieron los encargados de ejecutar sus órdenes, que quedaron terminadas en el año 1533.
Algunos críticos han discutido la parte de gloria que corresponde a D. Fadrique Enriquez, en la edificación de este soberbios monumento de la cultura artística de Sevilla en los comienzos del siglo XVI; tipo perfecto del arte mudéjar. Fundase para ello en el texto de la inscripción que se lee en la portada principal de la Casa de Pilatos, donde se dice:
Esta casa mandaron hacer los ilustres señores D. Pedro
Henriquez, Adelantado Mayor de Andalucía, y Doña Catalina
de Ribera su muger; y esta portada mandó hacer su hijo D. Henriquez
de Ribera Marqués de Tarifa, así mismo Adelantado.
Asentose año de 1533.
De esta inscripción pudiera deducirse, que solo la portada de la Casa de Pilatos, fue obra de D. Fadrique, pero carece de exactitud. Cierto es, que D. Pedro Henriquez y su mujer, Doña Catalina de Ribera, proyectaron y pusieron los cimientos del referido palacio; pero no es menos cierto que en la fecha de terminación del edificio (1533) hacía 41 años que D. Pedro había fallecido, y 28 que Doña Catalina había pasado a mejor vida. Es evidente, pues, que si los padres dieron comienzo a la gran casa, el hijo impulsó la obra durante una larga serie de años, y la acabó. Por más que su sobrino e inmediato sucesor, D. Per Afan de Ribera, primer Duque de Alcalá y virrey que fue de Nápoles, le pusiese los últimos perfiles, y completase con los objetos arqueológicos que trajo de aquella ciudad de Roma, el museo que D. Fadrique estableció en ella a su regreso de la Tierra Santa y viaje de instrucción y recreo por Italia en los años 1520 y 21. Museo hoy desbaratado, pero que los que tuvieron ocasión de verlo, hace lo menos dos siglos, calificaron de "Tesoro de notables antigüedades romanas acopladas por el Marqués de Tarifa y por el Duque de Alcalá, que trajeron de Italia bellísimas estatuas; tablas de mármol con hermosos bajos relieves; trozos de arcos triunfales, especialmente de los célebres de Tito y Vespasiano; simulacros de dioses y de héroes, etc. etc."
Portada de la Casa de Pilatos. 1920.
Corre la creencia de que se le dio el nombre de Casa de Pilatos, porque fue edificada según los planos de la que habitara en Jerusalén el Gobernador de Judea, y que fueron traídos a Sevilla, a su regreso de Tierra Santa por D. Fadrique Enriquez.
También se dice que, además, el poderoso magnate mandó establecer un Vía-Crucis desde su palacio al templete de la Cruz del Campo, guardando la misma distancia que existía entre el Palacio de Pilatos en Jerusalén y el Calvario donde se sacrificó a Cristo.
Plaza y puerta de la Casa de Pilatos.
De traza elegante y sencilla es la portada, esculpida en Génova por Antonio María de Apríle, da por su parte exterior a una pequeña y tranquila plazoleta que corta la tortuosa calle de las Águilas, y por su interior a un ancho vestíbulo, descubierto en su mayor extensión y con techumbre por la que conduce al hermoso patio central del edificio.
Placita y Casa de Pilatos. Foto: Jean Laurent 1862.
La fotografía recoge un lugar recoleto con la plaza empedrada, con chino lavado, y la hornacina corresponde a la primera estación del Vía Crucis, que desde 1957 ha sido restaurada por las Hermandades y Cofradias de Sevilla.
Plaza de Pilatos con la fachada del Palacio. Dibujo de Richard Ford, 1832.
De la fachada del Palacio en la actualidad han desaparecido el balconcillo postizo del mirador y el cerramiento de éste, así como la fuente de traza renacentista que se ve en el ángulo del dibujo; este palacio desde 1483, año que dio comienzo su construcción, hasta el primer tercio del siglo XVIII, sufrió numerosas intervenciones, por lo que presenta una combinación de estilos renacentista, mudéjar español e italiano.
Patio central. Postal de 1905.
Ocupa el centro del último de dichos patios una severa fuente de mármol rematada por la cabeza de Jano con sus dos caras.
Patio de la Casa de Pilatos, galería Norte. Foto: J. Laurent 1866.
Zambra gitana, celebrada en el patio de la Casa Pilatos, en presencia de SS. MM., en 1908.
En los cuatro ángulos se levantan colosales estatuas de las dos Minervas y de Ceres.
Veinticinco columnas de mármol blanco sostienen los ricos artesonados de las galerías, hallándose los arcos revestidos de primorosas yeserías mudéjares, con inscripciones africanas en loor de Alah y en alabanza del fundador del egregio palacio.
Escultura a la Diosa Ceres.
Las paredes están casi en su totalidad, revestidas de azulejos, los más resplandecientes de cuantos de aquella época existían en Sevilla. Brillan como el oro fino y rutilan y refulgen como los rubíes y diamantes.
También en los muros interiores de dichas galerías, pueden admirarse veinticuatro bustos de emperadores romanos, la mayor parte de muy notable ejecución.
Dice un celebrado autor, que en este recinto se solía reunir "bizarra cuanto discretísima Academia, formada por los más famosos ingenios sevillanos que entonces florecían, de pintores, literatos, poetas, comediantes y guerreros que olvidaban las fatigas y pesadumbres humanas, en literarias justas y poéticos certámenes, patrocinados por el gran Mecenas Don Fernando Enriquez de Ribera, tercer duque de Alcalá, noveno adelantado de Andalucía, y quinto marqués de Tarifa, que no obstante sus pocos años, emulaba con su saber los más doctos varones, ganando plaza de muy versado entre los cultivadores de la lengua latina y entendido en las historias sagrada y profana".
Ventana de la Casa de Pilatos.
La capilla.
Es de admirar la puerta de la capilla, cuyo arco presenta muy interesantes elementos de estilo ojival, así como la techumbre de la misma, toda ella adornada de preciosos azulejos.
Fotografía artística de Ricardo Schmelz, de otro patio de la casa.
Antepatio de la Casa de Pilatos.
Varios salones, todos revestidos de yesería y azulejos, completan la planta baja, amén de los primorosos jardines, con restos antiguos romanos, bustos, capiteles, monumentos epigráficos de sumo interés, y una bellísima reja de hierro forjado.
Primorosa reja del siglo XVI, en los jardines de la casa.
Cancela de la Casa de Pilatos.
Los salones de la galería alta también son muy ricos por su ornamentación de azulejos preciosos artesonados. En uno de dichos salones se descubrieron pinturas murales, pertenecientes al siglo XVI, de muy apreciable valor.
De Francisco Pacheco son las magníficas pinturas del techo de otro de los salones.
Mansión de reyes podría ser esta callada y solitaria mansión, por la riqueza artística que atesora y por la esplendidez de las estancias que encierran, y que nos transportan a aquellas otras edades de más afán por el arte puro y verdadero.
Fuentes: Bibliografía y archivo particular.
Bellísimo todo lo que nos muestras de esta Casa de Pilatos, que aunque he estado unas cuantas veces en Sevilla, no conozco. Me quedo con el nombre por si vuelvo otra vez.
ResponderEliminarMucho arte hay encerrado en este lugar. Las paredes parecen esplendidas en la fotografía que muestras de la ventana de la Casa, y las rejas una maravilla.
Un lugar para que disfrute la mirada, ya que a estas alturas ya no voy aprender nada de este arte tan bello.
Un placer pasearse con tu buen hacer, este lugar tan hermoso.
Un abrazo Manuel, y buen fin de semana.
Muchas gracias, Elda.
EliminarUn abrazo Elda, y feliz semana.
Excelente reportaje que documenta un lugar de indudable valor histórico y cultural. El patio de columnas con su galería es de una belleza especial. Gracias Manuel por la riqueza de tu trabajo, un gran saludo.
ResponderEliminarGracias a ti, Miguel.
EliminarUn abrazo.
Hermosa visita la que nos propones, para admirar un bello palacio sevillano.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias, Alfred.
EliminarUn abrazo.
Poee las fotos que nos muestras se ve una preciosa e interesante obra, se mantiene bella tal cual nos dejas detalles y pormenores en tu extensa y amena presentacion, es digno de visitar y admirar, ya me gustaría poder hacerlo.
ResponderEliminarGracias Manuel, publiqué hace unos días pero no actualizó.
Abrazos.
Ambar
Gracias, Ambar.
EliminarUn abrazo.
Magnífica descripción y documentación besos.
ResponderEliminarGracias.
Muchísimas gracias.
EliminarUn abrazo.
¡Qué he disfrutado de esta entrada, Manuel!
ResponderEliminarEsta casa-palacio es una auténtica joya arquitectónica. La he explicado muchas veces a mis alumnos y cada vez que voy le encuentro algo nuevo.
Besitos
Gracias, Isabel.
EliminarUn abrazo.
Manuel otro de tus interesantes reportajes como siempre bien documentado tanto en imágenes y testo.
ResponderEliminarSaludos.
Gracias, Tomás.
EliminarUn abrazo.
Enhorabuena , Manuel. El hecho de hacer el comentario indica mi leve mejoría .
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Guillermo
Me alegro muchísimo, Guillermo.
EliminarUn fuerte abrazo.
ESE LENGUAJE DE LA LÁPIDA, ME TRAMA!!!
ResponderEliminarABRAZOS
Gracias, amigo.
EliminarUn abrazo.
Con esos portales y esa maravilla arquitectónica no solo se inspiraban los grandes pintores y artistas Sevillanos, creo que hasta yo que soy una simple mortal me inspiraría ;) un beso con todo cariño para ti Manuel con todo afecto.
ResponderEliminarGracias, Patty.
EliminarUn beso.
Si te soy sincera, aunque no conozco este palacio, te admiro por todo tu trabajo y dedicación para recopilar toda la documentación que compartes en tus interesantes entradas.
ResponderEliminarSi vuelvo por Sevilla, tendré que admirar de cerca la casa de Pilatos.
Te deseo un estupendo fin de semana.
Cariños.
kasioles
Gracias, amiga, y anímate.
EliminarUn abrazo.
Hola Manuel, como siempre un fantástico trabajo de documentación,.
ResponderEliminarNo conozco Sevilla y tengo que ponerle remedio lo más pronto posible porque tengo muchas ganas de visitarla y desde luego ver esta preciosa casa va a estar en mis planes.
Feliz fin de semana
Gracias, amiga Conxita.
EliminarUn abrazo.
Es de un lujo "asiático", y uno de los pocos lugares de Sevilla que no conozco. A ver en la próxima. Aquí como siempre, he conocido un poco más, y desde un punto de vista distinto, y más apreciado por mí, a los demás.
ResponderEliminarUn saludo.
Muy amable amigo, y muchas gracias.
EliminarUn abrazo.
Manuel, son datos importantísimos. Eres una enciclopedia. Gracias.
ResponderEliminargracias, Manuel.
EliminarUn abrazo.
Volvió impresionado de la Vía Dolorosa y quiso hacerla revivir en Sevilla.
ResponderEliminarLo tendré presente si voy algún día a Sevilla.
Un feliz fin de semana.
Muchas gracias, Mari.
EliminarUn abrazo.
Es un lujo llegar a tu espacio Manuel, siempre aprendo cosas que ignoro y que de ninguna otra forma podría conocer.
ResponderEliminarYa te lo he dicho una vez, deberían nombrarte "Cronista de la villa de Sevilla" no creo que la ciudad tuviese un mejor paladín que tú. ¡Es increible que sepas tantas cosas del pasado de una ciudad!
Un abrazo con aromas de primavera.
Ángeles
Muchísimas gracias, amiga Ángeles.
EliminarUn fuerte abrazo.
Buenas noches Manuel,
ResponderEliminarpara mí es uno de los palacios más bonitos de la capital hispalense. Lo visité hace un tiempo, y me transmitió una gran paz y mucha felicidad.
Le hice una entrada en el blog, no se merece menos.
Gracias por todas las fotos, y por este blog maravilloso del que siempre aprendo cosas nuevas.
Un abrazo.
Gracias, Tania, y de inmediato paso a ver esa entrada.
EliminarUn abrazo.
He estado varias veces en Sevilla, es una de esas ciudades que te enamoran pero nunca he tenido ocasión de ver el palacio de Medinaceli. La próxima vez.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias, Ambar.
EliminarUn abrazo.
Me ha encantado estar en tu rincon de letras
ResponderEliminarMuchas gracias.
EliminarUn saludo.
Muy buena información histórica de este precioso edificio sevillano.
ResponderEliminarAhora hace varios años que no visito Sevilla, pero cuando pase por allí me acordaré de tu reportaje.
Besos
Gracias, Antonia.
EliminarUn beso.
Manuel, que maravilla, los mecenas deseosos de notoriedad pero tambien con ganas de conservar en buen estado sus patrimonios y mostrarlos ya son una especie en extinción en nuestra sociedad. Qué pena.
ResponderEliminarMira si no la señora del pazo de Meiras haciéndose la loca.
Después de leerte y de ver tus grabados y fotos antiguos que me han encantado, me fui a buscar en la Red cómo está ahora, y así pude admirar el colorido de los azulejos y sus patios floridos. Una gozada.
Queda apuntada para verla en vivo y en directo.
Para mí es placer enorme pasar un rato en tu blog, Manuel, disfrutar y aprender tanto.
Un beso,
Gracias, Tesa.
EliminarUn beso.
Hola Manuel.
ResponderEliminarTú eres también arte, cómo si no ibas a traernos tanta maravilla?.
Como Tesa lo he visionado en la red al detalle y es una joya de arquitectura y arte hcon todo lo que contiene.
Me ha encantado. Hemos visitado varias veces Sevilla, pero no este Palacio. Todo llegará.
Un abrazo fuerte Manuel.
Muchas gracias, Ángela.
EliminarUn fuerte abrazo.
Hala Manuel, he estado en Sevilla pero no conozco este palacio, y no sabía de su existencia. Se ve un lugar muy interesante para visitar, y llenarse de todas esas antigüedades romanas. Felicidades por tu excelente reportaje.
ResponderEliminarCuídate, un cálido abrazo!
Muchas gracias, Cristina.
EliminarUn fuerte abrazo.
Otro gran y excelente trabajo, de tantos y tantos que nos presentas, y de lo bonito que hay que contar por esa bonita tierra de Andalucía. Visite Sevilla hace unos años, pero la verdad es que el edificio que tan bien detallas no lo recuerdo. Gracias por mostrarlo.
ResponderEliminarAbrazo Manuel.
Muchas gracias, Rafa.
EliminarUn fuerte abrazo, amigo.
¡Hola Manuel! Precioso reportaje. Nosotros visitamos la Casa de Pilatos hace un par de años un día a las 16:00 de la tarde, porque era gratis en ese horario aquel día y tuvimos hasta una visita guiada gratis también.Mi marido se quejaba del calor que pasamos en la cola porque no recuerdo si era verano o poco le faltaba, ¡ja,ja,ja! Pero nos encantó.
ResponderEliminarLo que más nos quedó grabado en el recuerdo fue lo del Vía Crucis, que tú también has relatado aquí.
Me has hecho recordar aquella visita "tan veraniega".
Muchas gracias por traer documentación tan curiosa e interesante. ¡Un saludo!
Gracias, Ana.
EliminarUn fuerte abrazo.
Qué bonito es!!! No lo conocía. Un abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias, amiga.
EliminarUn abrazo.
Que belleza de esa epoca!!!!
ResponderEliminarBuena cuenta bancaria tendria el señor no????
Gracias por compartir tantas cosas gratas de tu hermosa tierra
Cariños
Jajaja, seguro que no le falta.
EliminarGracias, amiga.
Un fuerte abrazo.
Un reportaje precioso y muy bien realizado.
ResponderEliminarMe encanta leerte.
Un fuerte abrazo.
Gracias, amiga.
EliminarUn fuerte abrazo.
Un hermoso palacio y un guía de excepción. Gracias manuel.
ResponderEliminarSalu2.
Gracias, amigo.
EliminarUn abrazo.
Es increíble: sé que he estado allí, pero el tiempo (tanto el que ha pasado desde el viaje como desde el momento de las fotos) me hace imposible reconocer el lugar. Es como si jamás hubiera estado ni cerca :S
ResponderEliminarGracias, amigo.
EliminarUn abrazo.
¡¡¡Hola Manuel!!!
ResponderEliminarLa Casa Pilatos tengo ganas de visitarla. Las innumerables veces que fui a Sevilla no tuve la oportunidad, ni el tiempo preciso para disfrutar de su belleza.
Ahora, el próximo 17 de Abril, vamos a realizar un viaje a Andalucía...No sé que día vamos a ir a Sevilla. Iremos a ver la Casa Pilatos. A ver si coincide y nos podemos ver nosotros, también.
Abrazos.
Cuando tu quieras, no dejes de ponerte en contacto conmigo cuando ande por aquí.
EliminarUn abrazo.
Unas imagenes del pasado realmente preciosas, saludos y feliz semana.
ResponderEliminarGracias, amigo.
EliminarUn abrazo.
¿Casa de PIlatos en Sevilla? Seré burra, he estado muchas veces y creo que nunca visité el palacio. Gracias, Manuel.
ResponderEliminarBesos.
Gracias, y no eres la única que desconoce este palacio, está en el centro histórico pero, un poquito separado.
EliminarUn beso.
Celia, por si lees esto, he intentado en varias ocasiones y de diferentes formas entrar en un tu blog, y ne sale que se ha eliminado. Dime algo, por favor.
EliminarLLeguen a ti mis deseos de:
ResponderEliminarBuena Semana Santa a todos!!!, que viváis de acuerdo a vuestros sentires y que los días sean de bien... estar.
.
Nos vemos el domingo de Pascuas!!!!!!!
.
Y... hasta ese momento que Dios los tenga en la palma de su mano!!!!
.
Abu
Gracias, abuela.
EliminarUn abrazo.
Cuando estuve hace años no visité la Casa Pilatos, este año me planteo hacer unos días a Sevilla y esta entrada tuya me ha animado para que sea lo primero que visite. Como nos tienes acostumbrados, una excelente entrada en información y fotografías Manuel. Gracias.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias, Conchi.
EliminarUn abrazo.