Mujeres y niñas, esperando con calma en la fuente, que el chorrillo de agua -hilo finísimo y cachazudo- aumentase su grosor, para llenar las vasijas.
En Sevilla, la situación de este servicio hacia 1862 se concentraba en la existencia de cuarenta y dos fuentes públicas diseminadas por la ciudad que se concentraban en determinadas plazas, barrios y parroquias, no siendo todas de agua potable.
En general la situación era bastante deficitaria (existiendo numerosas áreas desprovistas de suministro) y tanto más cuanto mayores eran las demandas en razón directa al aumento de la población.
Relación de fuentes públicas en Sevilla, en el año 1862:
Hacienda de la Res; Ranillas; Prelado en la Calzada; Presidio; San Benito; Depósito en la Alameda de Hércules; Lirios; Rubios; Puerta de Córdoba; San Roque; Santa Lucía; Plazuela Madre de Dios; Pumarejo; Macarena; Puerta de Osario; Santa Marina; Caño Quebrado; San Román; Santa Cruz; Alfafa; Salvador; Puerta de Triana; Lombardos; Puerta Real; Plaza de San Vicente; Cantarranas; Plaza de Pilatos; Magdalena; San Francisco; Baratillo; La Laguna; Casa de la Moneda; Postigo del Aceite; Puerta de Goles; Descalzos; Plaza de la Encarnación; San Leandro; Villasís; Plaza del Duque; San Lorenzo; Alhódigas y Narcisos.
La primera empresa relacionada con el suministro de agua, se crea en Sevilla en 1883, y se trata de una compañía con capital extranjero, la The Seville Water Works Company Limited, de Londres, conocida popularmente como el "agua de los ingleses", y que solo consiguió incrementar en más de una década, en unos cuantos litros el consumo de la población.
El viejo puente de tablas (1896 -1959)
Foto: Carlos Lacave (Gelatinohaluro Estereoscópica). 1904.
Situado en Chapina la "Pasarela del agua" conocida como el "puente de tablas" fue inaugurada el 23 de Abril de 1896. El proyecto obra de Carlos A. Friend y Alfonso Escobar, por encargo de la Compañía inglesa de Aguas "The Seville Water Works Company Limited", resultado del informe demográfico-sanitario del Dr. Ph. Hauser (1882). Se derribó en 1959.
Postal de los dos puentes menores de Sevilla, el del Ferrocarril a Huelva y el puente de Tablas o "Pasarela del Agua". Postal de 1903.
En 1892 se funda la Compañía Internacional de Aguas instituida por socios de París y Bruselas, cuyo objetivo era tomar y tratar agua del Guadalquivir, para abastecer la capital. Según consta, esta compañía completaba con la anterior, el suministro local y casi no llegó a funcionar, por lo que fue liquidada en 1894 y sustituida por la Compañía de Servicios de Agua, S. A., de capital belga y que tampoco aportó una gota a la sedienta ciudad.
Los años fueron pasando, y el crecimiento de la población era superior, a la capacidad de los manantiales disponibles, y como decía uno de los alcaldes de la época, "Sevilla, se moría de sed"; y no fue hasta el año 1923, cuando por iniciativa del acaudalado fabricante, Sr. Mensaque, el concejal, Sr. Rodriguez, y secundados ambos por otros concejales, se construyeron por los barrios más populosos del centro de la ciudad, siete bonitas fuentes públicas, intentando solucionar de la mejor manera posible, la acentuadísima escasez de agua, que desde hacía años, se venía soportando.
El pozo tubular o "Fuente Pública"de la Plaza de San Pedro, que abastecía de agua a dicha barriada, merced a la iniciativa y a los esfuerzos, de los Sres. Rodriguez y Mensaque, secundados por otros concejales.
En la imagen figuran: el Sr. Mensaque, y el concejal, Sr. Rodriguez, iniciadores y gestores de tan necesitada obra municipal.
A continuación algunas vistas de las bonitas fuentes públicas instaladas en Sevilla capital, para solucionar del mejor modo posible, la acentuadísima escasez de agua, que desde hacía años venía soportando el pueblo sevillano.
Otra fuente de agua, inauguradas ese mismo día.
Autoridades e invitados que asistieron a la inauguración y bendición, de la fuente pública en la Plaza de San Agustín.
Fuente de la Plaza del Pumarejo.
Pero sucedió que, el reclamo de la Exposición Iberoamericana de 1929 -que se venía ya construyendo desde hacía una década-, continuase el éxodo creciente de población de las áreas rurales -sobre todo artesanos y obreros de la construcción- a la ciudad, siguiera generando un aumento considerable de habitantes concentrados en la gran urbe, que necesariamente imponía no solo urgentes necesidades de alojamiento y disponibilidad de espacios, sino también un mejor servicio de abastecimiento de agua potable, a las zonas públicas.
Una vez pasada la Exposición Iberoamericana de 1929, el problema seguía, llegando a ser una vergüenza ver en los barrios extremos -y también en algunos del centro de la urbe-, como las mujeres se disputaban heróicamente la posesión de un cacharro de agua. El agua era un viejo problema de Sevilla, que la época estival daba motivo a estas escenas callejeras, que debieran avergonzar a los celosos regidores de la administración local.
Aspecto de los depósitos de agua filtrada del Guadalquivir, inaugurados en 1926.
Muchas veces se intentaron soluciones a este viejo problema del agua, pero siempre faltó decisión y firmeza para afrontarlo de cara, poniendo por encima del interés privado, la suprema aspiración de la ciudad, que exigía no morir de sed en las ardientes jornadas de la canícula. Y es que el problema de la falta de agua tenía raíces hondísimas, que venían de tiempo muy atrás, como hemos visto, sin que hubieran querido nunca tener en cuenta, la única solución viable, que si en esos momentos suponían gastos cuantiosos, a la larga esos dispendios que hiciera la ciudad, hubieran sido productivos. Porque Sevilla hubiera resuelto definitivamente el problema del agua, y la ciudad en sus veranos caliginosos, no vería jamás asomar en el horizonte callejero el símbolo de la protesta popular, encarnado en esos grupos sedientos, que con los cacharros en alto pedían y reclamaban agua angustiosamente, con el imperio obligado de quien la necesita para beber.
Una fuente pública, en pleno asalto del pueblo, sediento.
He aquí, como reclamaban los sevillanos el agua.
La solución radicaba en afrontar el problema de cara, sin vacilaciones, porque a poco más de treinta kilómetros de Sevilla, había veneros de agua purísima, en plena comarca serrana de Cala. Ya se pensó antaño en una red de entubaciones, para traer el agua de la sierra a Sevilla, para que Sevilla en lo porvenir, pudiera mirar sus veranos ardentísimos, con la confianza de quien tiene como factores propicios el sol y el agua, los dos elementos que podrían constituir una alianza, que garantizase con optimismo, el futuro y la sanidad ciudadana.
Con el paso de los años se fueron construyendo pantanos para abastecer de agua la ciudad, como los de Aracena y Zufre situados en la provincia de Huelva, y los de La Minilla, El Gergal, Cala y Melonares en la de Sevilla, que según el experto sumiller de aguas, D. Faustino Muñoz, señala el agua de Sevilla como la de mayor calidad entre las grandes ciudades de España.
Fuentes: Bibliografía y archivo particular.
Si deseas ver otros temas relacionados con el agua de Sevilla, por favor, haz clic: AQUÍ.
En la esquina de mi casa estaba la fuente del Pilar en La Calzada en lo que hoy es la calle Luis Montoto. Mi padre conserva una foto en ella de niño rodeado de cabras...jeje.
ResponderEliminarMe ha gustado conocer esa estructura a modo de pequeño templete que las envolvía
Besitos
Gracias, Isabel, y guardad bien esa foto que es una joya.
EliminarBesitos.
Hi Manuel :)
ResponderEliminarVery interesting information and photo documentation.
My good friend, I salute you from warm and until yesterday truly spring Poland!
Muchas gracias, Anna.
EliminarUn saludo.
Un articolo prezioso e avvincente per conoscere a fondo Siviglia. Un caro saluto
ResponderEliminarMuchas gracias, amiga Silvia.
EliminarSaludos.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarQuerido Manuel,
EliminarLa gente a menudo se olvida de las luchas de nuestros antepasados por la principal supervivencia de la vida: el agua.
Cuando era adolescente de 14 años, recuerdo que nos conectamos a la tubería principal de agua. Ya no teníamos que usar nuestra bomba de cobre.
Gran historia y sobre todo para las generaciones más jóvenes.
Abrazos,
Mariette
Muchas gracias, Mariette.
EliminarUn abrazo.
Cuando paseas, es bonito encontrar estas fuentes. Sobre todo, si tienen detrás una gran historia.
ResponderEliminarLo que cuentas es muy interesante.
Un fuerte abrazo y mis deseos de una feliz semana.
Muchas gracias, Amalia.
EliminarUn fuerte abrazo.
Siempre los sufrimientos del pueblo ha sido y es por la desidia y el egoísmo de los mandatarios en todos los lugares.
ResponderEliminarToda esta documentación me ha recordado cuando yo era pequeña, que en verano iba con las amigas del barrio aquí en Madrid con el botijo a coger agua fresca que salía de una grieta del Canal que pasaba por allí cerca de mi casa, y de vuelta nos tirábamos el agua en los pies corriendo y riendo, y teníamos que volver a llenarlos, :))).
Una pena que en aquellos tiempos no hubiera agua suficiente.
Las fuentes son una maravilla, y en las fotos queda reflejada la escasez con tanta cantidad de gente esperando.
Muy bonita esta información Manuel.
Un cálido abrazo y buen finde.
Gracias, Elda.
EliminarUn abrazo.
Me ha sorprendido la cantidad de fuentes que había en Sevilla y también la escasez de agua que sufrió . Saludos
ResponderEliminarMuchas gracias, Charo.
EliminarUn slaudo.
Lack of water is always a dramatic subject. There were 42 public water fountains only in certain areas of the city!
ResponderEliminar"Seville is dying of thirst" said a mayor. Interesting pictures with Sevillians' protests demanding water!
Gracias, Duta.
EliminarAbrazos.
Las fuentes Públicas eran fundamental, en la españa de esa época. No nos damos cuenta de la importancia del agua, hasta que no escasea. Es tremenda la sequía, que estamos padeciendo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias, Antonia.
EliminarUn abrazo.
Crónicas del agua... Siempre inspiradoras -cuando no desasnadoras- son tus entradas, amigo Manuel.
ResponderEliminarAbrazo hasta vos!!
Muchas gracias, Carlos.
EliminarUn abrazo.
En lugares como Andalucía el agua es algo primordial en especial para el consumo humano y parece que fue muy difícil poner remedio.
ResponderEliminarSaludos.
Muchas gracias.
EliminarUn saludo, Tomás.
El problema del agua...lo vital, desde ese tiempo hasta ahora ...poca conciencia tiene quien no sabe de esa escasez y de lo que viene a futuro.
ResponderEliminarOjalá por allá se haya aprendido bien la lección.
Te dejo un abrazo.
Gracias, Maulen.
EliminarUn abrazo.
No podemos imaginar la relevancia que tenía el agua potable en otros tiempos, la imposibilidad de tenerla en casa, donde no había un grifo que abrir para poder disponer de ella. Los viajes cargadas con los botijos y vasijas a la fuente más cercana por parte de las mujeres, una o dos veces al día, dependiendo del número de integrantes de la familia. O las tertulias y amistades que se establecían en el río o en estos pilares de agua. En Béjar se solía ir a a lavar al río, con temperaturas heladas y las aguas congeladas que provenían de la sierra.
ResponderEliminarSaludo
Muchas gracias, Carmen.
EliminarUn cordial saludo.
Como podemos ver en tu entrada, el problema del agua viene de muchos años atrás, algunas de las fuentes tienen nombres muy curiosos. Aquí, con la sequía entramos ayer en cautela a 200 litros por persona y día.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias, Conchi.
EliminarUn abrazo.
Excelente entrada para comprobar como paso y presente se dan la mano a través del agua. Un bien antes escaso por la falta de obras públicas y ahora por las sequías a las que debemos adaptarnos en una especie de vuelta atrás. Me han encantado ese viaje al pasado y ver esas bonitas fuentes públicas de Sevilla.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo, Manuel, y buen fin de semana.
Muchas gracias, Miguel.
EliminarUn fuerte abrazo.
¡Hola, Manuel! Curiosa entrada de las fuentes de Sevilla. Posiblemente en la actualidad sean bastante menos numerosas.
ResponderEliminarEn Cádiz, hace décadas que desaparecieron las fuentes de agua potable. Hasta hace seis años que un recién nombrado alcalde las instaló de nuevo, todo el mundo iba con la botellita de agua mineral en la mano.
Veremos cómo se va a resolver el grave problema que tenemos de sequía, el verano está a la vuelta, y el turismo masivo a punto de aterrizar.
Feliz finde.😘
Muchas gracias.
EliminarUn abrazo, Emma.
¡Cuántas confidencias se contaban en las fuentes!
ResponderEliminarSevilla era una de las ciudades andaluzas que más fuentes tuvo en antaño, ahora las que quedan son ornamentales y son unas joyas.
Magnifica aportación, una vez más.
Enhorabuena.
Besos.
Muchas gracias, Mari Carmen.
EliminarBesos.
Que bonito reportaje Manuel. Como siempre es un placer pasarme por aquí y aprender cada día un poquito más de tu tierra. Un abrazo y feliz fin de semana.
ResponderEliminarMuchas gracias, amiga.
EliminarUn abrazo.
En Barichara, donde viví hasta los cuatro años, a pesar del acueducto, naturalmente deficitario, conservaba esas fuentes públicas de agua. No con la monumentalidad de las de tu tierra. Una llave adosada a la pared y una pileta bajo la llave, con caño, para que el agua no se regara. Hermosa arquitectura la de las fuentes de tu tierra. Y, creo que como las de acá, eran espacios de socialización mientras la gente, espera su turno para platicar de la vida. Un abrazo con este gran aprecio colombiano. Carlos
ResponderEliminarGracias, amigo Carlos.
EliminarY otro abrazo va.
Foto molto belle!
ResponderEliminarGracias, Olga.
EliminarSaludos.
Se me había escapado esta entrada. Besos.
ResponderEliminarMuchas gracias, Teresa.
EliminarBesos.
Magnificos documentos los que nos brindas... Ay, como va cambiando todo...
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas Ildefonso.
EliminarUn abrazo.
Um post histórico muito interessante. Ainda me lembro de quando ia de férias para a terra dos meus pais irmos à fonte buscar água para casa pois não havia água canalizada.
ResponderEliminarFantástica informação e imagens.
Um grande abraço
Gracias, amiga María.
EliminarUn fuerte abrazo.
Muy buenos amigo Manuel, algo que desgraciadamente vuelve a ser un problema con la sequía que atravesamos, o bien no nos acordamos o bien todo va cambiando, son ciclos, también recuerdo hace muchos años inundaciones por el desbordamiento del gudalquivir, recueerdo poco pero dentro de ello la preocupación por mi família que allí tenemos, idependiente del cambio climático que por supuesto creo y somos todos responsables de esto.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Muchas gracias, José Antonio.
EliminarUn fuerte abrazo.
Mirar atrás y recordar Manuel. Esa fuente me ha recordado a la de Concejos de Cáceres. Allí iban las mujeres con los cantaros a por el agua. Siempre es un placer leerte. Gracias.
ResponderEliminarPor aquí estamos bien de agua, el otro día bajamos a Granadilla el pueblo abandonado por el embalse de Gabriel y Galan y está al 73% de su capacidad, esperemos que siga bien para no tener problemas como está pasando en varios sitios
Buen domingo.
Un abrazo.
Gracias, Laura.
EliminarOtro abrazo va.
Qué bonitas las fuentes públicas que se inauguraron en Sevilla para solucionar el problema de la escasez de agua. Un viejo problema, ahora agravado por la sequía que padecemos.
ResponderEliminarAbrazos!
Muchas gracias.
EliminarUn abrazo, amigo.
Eso es lo que más nos hace falta Manuel... el agua.
ResponderEliminarEsperemos que llueva pronto porque la cosa pinta muy mal.
Feliz semana y un abrazo.
Gracias, Lobezna.
EliminarUn abrazo.
That would have been a wonderful bridge back then, and all the photos are lovely to see plus your commentary - thank you.
ResponderEliminarGracias, Margaret.
EliminarUn saludo.
Muy buenas amigo Manuel.
ResponderEliminarInteresantisimo esto de las fuentes de Sevilla .
Vaya fotos espectaculares.
Una de mis "series" es sobre fuentes , aunque no con tanta información como tu nos ofreces.
La pena aqui en Catalunya es que actualmente con la falta de agua , las fuentes estan todas cerradas , sin agua .Una pena .
Un abrazo y gracias por tu visita .
Muchas gracias, Joaki.
EliminarUn abrazo.
Maravillosas fotos, siempre muy bien descritas
ResponderEliminarPaz
Isaac
Muchas gracias, Isaac.
EliminarSaludos.
I tuoi post mi piacciono sempre, trovo tante fotografia in bianco e nero e sono la mia passione.
ResponderEliminarBuona giornata.
Gracias, Giancarlo.
EliminarSaludos.
Manuel, maravillosas fotos, contigo sigo conociendo Sevilla.
ResponderEliminarCariños y besos, que tengas un maravilloso día
Muchas gracias, amiga.
EliminarUn beso.
Hola Manuel. Has tocado un tema que siempre está de actualidad porque la escasez de agua se va acrecentando con el cambio climático y la poca infraestructura para hacerle frente a tan grave problema.
ResponderEliminarEl agua es el oro líquido y la hemos derrochado irresponsablemente.
Nuestros alimentos lacrequieren en grandes proporciones cada vez más.
Mucho tendrán que cambiar nuestros hábitos de alimentación ya que no son sostenibles. El riego permanente de zonas verdes, jardines, piscinas y todo lo que implica la estética deblos lugares de ocio y turismo, se beben lo por haber.
Me ha gustafo saber de las fuentes sevillanas.
El comentario que me dejaste rompe con mi inercia bloguera y me anima a esforzarme en continuar un poco más.
Gracias. Un saludo
Gracias, amiga Beatriz.
EliminarUn abrazo y mucho ánimo.
No creas que hace tantos años, bueno si. yo también he hecho cola para coger agua, claro que era muy pequeña.
ResponderEliminarEl que no iba nunca era mi padre...bromas aparte, cuando ya cumpli los l5, ya tubimos una casa en condiciones, o sea, con agua.
Un abrazo amigo Manuel.
Muchas gracias, amiga.
EliminarUn abrazo.
Manuel, ¡no sabía que había tantas fuentes públicas en Sevilla! Es bueno que hayan ayudado a solucionar los problemas de agua potable en la ciudad del sur.
ResponderEliminarGracias, Nadezda.
EliminarUn abrazo.
Tu entrada me ha hecho pararme a pensar un rato en lo privilegiados que somos, podremos pasar sin muchas cosas que ahora tenemos, pero sin agua....
ResponderEliminarGran parte de nuestro cuerpo es agua y si nos falta...
Hoy en día, que siempre vamos corriendo a todas partes y aún nos falta tiempo, ¿Qué sería de nosotros si tuviéramos que guardar una larga cola para luego cargar con un cántaro de agua hasta nuestra casa?
Lo cierto es que no valoramos lo suficiente el levantarse y darse una calentita ducha, tendremos que apreciar mucho más este bien y no malgastarlo.
Cariños.
Kasioles
Tienes toda la razón, querida amiga.
EliminarAbrazos.
Quante fontane ci sono a Siviglia e sono anche molto belle !! Capisco che ci sia il problema dell'acqua in una città come Siviglia. Sono molto belle e utili queste fontane !! Un caro saluto e grazie per queste preziose testimonianze !!
ResponderEliminarMuchas gracias, Mirtillo.
EliminarUn saludo, amiga.
Bocas ya hechas rosas mecen fuentes en tú escelente post Manuel
ResponderEliminarquerido amigo de Sevilla son don y llamas ,lagrimas por tan rico
manar en otras partes suplicante ,es un placer leerte y ver tan egregio
reportaje Manuel , enhorabuena amigo .jr.
Muchas gracias, amigo José Ramón.
EliminarUn abrazo.
Muchas gracias por el esfuerzo que haces por difundir esas viejas imágenes de Sevilla. Aunque ha cambiado mucho desde entonces, Sevilla sigue siendo la ciudad mágica de siempre. Aunque ahora vivo en Madrid, pasé una parte de mi niñez en Sevilla y tengo los mejores recuerdos de esta maravillosa ciudad.
ResponderEliminarLas gracias siempre a ti por tu visita y amable comentario, y me alegro de que te haya traído bonitos recuerdos de nuestra ciudad.
EliminarUn cordial saludo.
Aún recuerdo cuando en mi pueblo teníamos que hacer cola en la fuente de la plaza para llenar unos cubos de agua. Mi abuela tenía un par de pequeños cubos para que los nietos pudiéramos hacer este trabajo. Hasta finales de los 70 no llegó el agua corriente. Esperemos que en un futuro no tengamos que hacer cola de nuevo, esta vez en un camión de reparto de agua porque se han secado las fuentes. Gracias por compartir estas magníficas postales antiguas de Sevilla.
ResponderEliminarMuchas gracias, Lorenzo.
EliminarSaludos.
Hola, Manuel.
ResponderEliminarAhora por la sequía porque no llueve y antes por otra cosa... el caso es que siempre hemos necesitado el agua que tan importante es para el consumo humano.
Esta mañana ha empezado a llover aquí, pero nada, ha dejado de llover y adiós muy buenas. Ha salido el sol y nada de lluvia.
Un abrazo.
Muchas gracias, amiga Piedad.
EliminarUn abrazo.
Speciali immagini, e osservazioni, su una città ricca di fascino, e speciale tradizione.
ResponderEliminarUn caro saluto
Muchas gracias, Silvia.
ResponderEliminarUn saludo.