El Templete de San Jerónimo, en Sevilla.

 

Templete de San Jerónimo (Sevilla).

Partiendo de la Cruz de San Lázaro, en dirección Norte, a través de un amplio camino terrizo se llegaba hasta San Jerónimo y a su Monasterio, y continuaba hasta la cercana localidad de  La Algaba, a través del Caserío "La Tercia" cuyo origen se remonta al final de la Sevilla islámica, cuando, según indica su leyenda, en este lugar el Rey  Fernando III, fijó el campamento del tercer cuerpo del ejército con el que conquistó la ciudad de Sevilla.

En terreno de este mismo caserío o cortijo, y muy cerca del viejo monasterio de San Jerónimo, en el año 1914, se descubrió un templete sin nada dentro, que estaba adosado y oculto entre una casa y la  "Venta del Santo", muy conocida y famosa en los anales andaluces, y que por su propio nombre ya nos puede dar a entender que, en el templete se podía haber guarecido la imagen de un Santo Cristo, en lugar de una cruz, y que tuvo que ser muy venerado ya que alrededor de este Santo, giraban historias romancescas de riñas y de amores; y de audaces caballistas bandoleros, que tiñeron de rojo las hojas de sus puñales y lograron que la metralla de sus trabucos asesinos hicieran aspersión de la sangre víctima, cuyas salpicaduras bermejas llegaron a manchar en profanación horrible, los brazos perdurablemente abiertos del símbolo redentor.

Detalle del templete descubierto en el Cortijo de Tercia, de Sevilla, propiedad de la familia Benjumea Morenés, en 1914.

Otro detalle del templete, descubierto tras el derribo de una casa y una venta, entre las que se hallaba oculto. 1914.

Al encontrarse vacío, nunca se supo exactamente, quien fue el primitivo Santo que se veneraba en este templete, aunque hay quien piensa que fue un San Onofre; así, que el Sagrado Corazón que van a ver a continuación, de hierro fundido y pintado de negro, no tiene nada que ver con la historia que les he contado, ya que es de principio de los años veinte del pasado siglo, así como su pedestal; y fue donado por el prócer sevillano M. Sánchez Dalp, quién costeó también de su peculio, la restauración del templete.

El Sagrado Corazón de Jesús, conocido vulgarmente en su barrio, como el "Santo Negro". 

Fuentes: Bibliografía y archivo particular.

El Templete de San Jerónimo, en la actualidad, que por el crecimiento de la ciudad, se ha quedado aislado en una zona de muy difícil acceso. 

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