El "Niño del Galego", de Gerena (Sevilla)

 

El "Niño del Galego", de Gerena (Sevilla).

Tras una larga pausa de tres años sobre consejos de guerras y auditorías durante la Guerra Civil, contra vecinos de este pueblo de Gerena,  y debido también a que han sido varias las personas que me han pedido de que continúe con ello, ya que quieren saber la verdad de lo que les sucedió a sus abuelos y padres, es por lo que me he decidido a retomar estas publicaciones; pero, en esta ocasión lo voy a hacer de forma más reducida que las anteriores, teniendo siempre en cuenta que cada causa contiene entre ochenta y cien documentos; por lo que voy a poner solamente la información necesaria, omitiendo esos datos de menor importancia, que después nadie los retiene, reduciendo la información gráfica, y omitiendo también mis comentarios, ya que las causas son todas muy parecidas a las anteriormente publicadas; todo, con el fin de que les sea más fácil y amena su lectura.

Atestado.

"José Jiménez Romero, Cabo provisional de la cuarta Compañía de la Comandancia de la Guardia Civil de Sevilla del Exterior, y en la actualidad Comandante del puesto de Gerena, de la tercera Compañía de la expresada Comandancia, por el presente atestado hace constar:  que presentado en esta localidad un individuo procedente de la zona últimamente liberada, procedió en unión del guardia primero... del mismo puesto, a la interrogación del manifestando llamarse J. R. A. de 27 años de edad, de estado soltero, natural y vecino de Gerena, con domicilio..., al preguntársele sobre su actuación durante la dominación roja en esta localidad, dice: que pertenecía a la organización de la U. G. T., como militante el 18 de Julio de 1936 se encontraba en esta localidad presentándose en el Comité a recibir órdenes, las cuales le fueron dadas en sentido de que practicara registros, lo que efectuó en varios domicilios recogiendo armas, también fue por aceite al cortijo Rompezapato de este término municipal, como así mismo por trigo al de Palmaraya en la carretera de Badajoz; al preguntársele sobre la muerte de un Falangista en La Algaba, dice que se encontraba en el referido pueblo el día del crimen, y que cuando se enteró estaba en una casa durmiendo sin que pueda precisar la que era, y que después marchó al puente donde estaba el cadáver, y que el alcalde dijo que se retirara todo el personal, por cuyo motivo regresó a esta localidad, añadiendo que el motivo de ir a La Algaba era por ver si podía llegar a Sevilla con el objeto de recoger a dos primas que se encontraban en la capital, prestando sus servicios domésticos. Después, dice que habían comentado en esta localidad que un vecino de la misma, y que el día del crimen se encontraba en La Algaba había registrado al infortunado Falangista y le habían recogido dinero, calcetines y una pistola sin que se sepa quien ha sido, por ser varios de la localidad los que se encontraban dicho día en La Algaba.

El 31 de Julio de 1936 al entrar en esta localidad las Gloriosas Tropas Nacionales huyó del pueblo en dirección a Madrid, llegando a Madrid sobre el día 10  de Septiembre presentándose a la Organización de Izquierdas Republicanas, ingresando en sus filas; al poco tiempo fue destinado al Batallón de Andalucía y Extremadura que lo agregaron a la Setenta y Siete Brigada de la Novena División, permaneciendo en el Frente de Madrid en distintos sectores hasta la liberación de Madrid.

Que no tiene más que decir, que lo dicho es la verdad en lo que se afirma y ratifica.

Testigos.

-   Interrogado el vecino de esta localidad B. F. V., mayor de edad, etc., dice: que dicho individuo desde que tenia edad para ello se dedicó a la propaganda revolucionaria tomando parte en la quema de la iglesia de esta localidad, efectuada en 1932, como por aquella fecha en los insultos dirigidos a la Guardia Civil de este puesto en la misma puerta del cuartel, en la cual el dicente intervino en la defensa de la fuerza con otros varios vecinos, y en la huelga revolucionaria del año 1936, prendió fuego con otros más a una haza de trigo, y él mismo, el 18 de Julio de 1936,  prendió fuego al casino de derechas diciendo en voz alta que por ser centro de derecha y corrupción había que destruirlo, como así mismo el estanco que era de una finca colindante y también de persona destacada de derechas; y según por manifestaciones de el mismo en la localidad, en su visita a La Algaba al llegar al puente del mismo pueblo en unión de varios más de esta localidad, encontraron a un aviador al cual mataron de un tiro de escopeta, quitándole todo cuanto llevaba el infortunado aviador, y al día siguiente lo decían por el pueblo como alardeando su valentía. Que no tiene más que decir, únicamente que se trata de una persona de bastante peligro, pues siempre destacó voluntariamente en actos de violencia.

Que lo dicho es la verdad...

-   Interrogado el vecino de esta localidad F. F. H. sobre los hechos que conoce del presentado de la zona últimamente liberada dice, que antes del movimiento Nacional ya se destacaba en su actuación revolucionaria quemando en esta localidad y en una plaza pública los ABC destinados para la venta en esta localidad, alentando a los trabajadores para hacer trabajo por la acción directa y en cierta ocasión en un cortijo de este término municipal denominado La Pizana, al estar efectuando el pago el encargado de la misma, cogió cierta cantidad que tenía sobre la mesa llevándoselo, alentando también y tomando parte en la pedrea que fue objeto el dicente en la puerta del ayuntamiento en esta localidad, y según dicho por él mismo tomó parte en el asesinato del falangista, hecho ocurrido en La Algaba durante la dominación roja, que su actuación ha sido bastante alentadora en esta localidad, sin que sepa haya efectuado otros actos de violencia.

Que lo dicho es la verdad...

-   Interrogado el corresponsal del periódico ABC en esta localidad, don. J. P. C., natural y vecino de Gerena, etc. dice: que en el mes de Febrero de 1936 al ir a recoger el paquete de los periódicos referidos, observó que el referido individuo en unión de uno conocido por "el mellizo" y otro por "el palangana" le prendían fuego a la prensa; considerándole bastante alentador durante la dominación roja. Que lo dicho es la verdad...

-   Preguntado el vecino de esta localidad M. P. G., mayor de edad, etc., dice: que durante el dominio rojo en esta localidad, se presentó el referido individuo en unión de varios más, los cuales conducían al sacerdote de esta localidad, todos iban con armas, llamando al dicente que se encontraba en su domicilio para que le acompañara a la Capilla del Cristo de la Vera cruz, efectuando un registro en dicha Capilla y llevándose unos plomos que había de unas lámparas, y al presentarse el J. R. A, con un cigarro encendido, le llamó la atención el Sr. Cura párroco de esta localidad, contestándole, que aquello no era una iglesia, y sí, una casa particular. Que lo dicho es la verdad...

-   Preguntado al vecino de esta localidad J. P. C. mayor de edad y con domicilio etc., dice: que este individuo tomó parte en los registros efectuados en su domicilio y conducción del dicente a la cárcel de esta villa; destacándose en el registro pues eran tres los registros que efectuó; y ya se había llevado una escopeta queriendo a la fuerza que le entregaran armas cortas; según rumores enseñó en esta localidad unos calcetines que decía haber quitado al aviador asesinado en La Algaba, creyendo el dicente tomara parte en el crimen, conceptuandole como de los más alentadores de esta Villa, y destacado en su actuación.

Que lo dicho es la verdad...

-   Preguntado el vecino de esta localidad J. P. R., mayor de edad, etc., dice: que si conoce al individuo J. R. A, y que el 18 de Julio de 1936, y en ocasión de ir a recoger una escopeta que le habían obligado a entregar, la cual tenía enterrada en el corral de su domicilio, y al salir al mismo había unos cuantos individuos apostados sobre las paredes del referido corral, y el individuo en cuestión le dio el alto en forma agresiva con el arma que llevaba, teniendo necesidad del dicente de justificar su presencia en el mismo; considerándole bastante destacado tanto en este caso como durante el dominio rojo, y huelga revolucionaria celebrada en esta localidad, días antes del Glorioso Movimiento Salvador de España.

Que lo dicho es la verdad...

En virtud de las manifestaciones que anteceden el que suscribe, acompañado del guardia primero... procedió a la detención del individuo J. R. A., el cual fue ingresado en el Campo de concentración de Sanlúcar la Mayor (Sevilla), y puesto a disposición del Excmo. Sr. Gobernador Militar de la provincia, el día 20 de Abril de 1939.

Juez de Instrucción.

A primeros de Mayo de 1939, fue designado como Juez Instructor, para este caso, un Alferez Provisional de Infantería y Juez Militar, quien habiendo de elegir Secretario para estas actuaciones designó a un Falangista, el que una vez en su presencia y bajo juramento manifestó no tener incompatibilidad para el cargo que aceptaba.

Las primeras medidas que tomó el Juez, fue la de solicitar antecedentes políticos sociales de J. R. A. al Negociado de Investigación de la Auditoría de Guerra del Ejército del Sur; al Juzgado Municipal de Gerena; al Ayuntamiento de esta misma población y a la Falange Española Tradicionalista de las J. O. N. S. de la jefatura de Gerena.

Los informes fueron los siguientes:

De la Auditoría de Guerra responden al Sr. Juez, que no existe en ese Negociado antecedente alguno político social, referente al dicho individuo.

Del Juzgado Municipal de Gerena, les responde el juez Valdera: Tengo el honor de contestar a su atenta orden en cuanto a los antecedentes políticos sociales de J. R. A., lo siguiente:

Otro de la pandilla de la juventud sin freno alguno; este se distinguió por su desenvoltura y descaro en el grupo del que formaba parte; lástima que se hubieran quedado en el misterio los hechos en que pudieron intervenir y que se sucedieron con demasiada frecuencia. ¡Tenía fama el niño del Galego!.

Es cuanto puedo informar respecto a dicho sujeto.

Dios guarde... 

Gerena, a 10 de Junio de 1939. Año de la Victoria.

-   Después de escrito este informe me entero de buen origen, que una vez entró en la iglesia para registrarla y, al hacerle el párroco la indicación de que se descubriera y dejara de fumar, él se le impuso con voz de descaro.

-  Tengo también el honor de informarle en cuanto a este vecino, que en las elecciones del 36, no tenía voto ni se encuentra en el Censo electoral. 

Los informes de la Alcaldía como como los de la Falange Española, son siempre idénticos, por eso mismo solo les pongo copia de uno, en esta ocasión el de la Falange.

En relación con su oficio del 3 del actual nº 128, comunico a V. S. los datos siguientes relativos a J. R. A. "Galego".

Este individuo estuvo afiliado a la C. N. T. pero seguramente el 18 de Julio sería "trotskista", porque así se denominaba a si mismo, J. C. G. "Palangana" a cuya pandilla (compuesta de la gente más peligrosa y más de acción que aquí había) pertenecía el informado. Esta cuadrilla fueron a La Algaba, estando este pueblo en poder de ellos y regresaron diciendo que habían arrojado al río a un oficial del Ejército Fascista y, algunos hasta enseñando prendas, que decían pertenecían al mismo.Volvieron a marcharse después, aún este pueblo sin liberar, y a la marcha de ellos le achaca mucha gente el que aquí no hubiese víctimas.

El informado fue siempre de lo más destacado y significado que había aquí y tomó parte en requisas, saqueos y en todos los desafueros que se cometieron. En las elecciones del 16 de Febrero, seguramente sería apoderado, ya que en el expediente no figura como interventor, y él entraba en todos los colegios y era uno de los que dirigían el cotarro.

Por Dios, España y su Revolución Nacional Sindicalista.

Gerena 14 de Junio de 1939.

Año de la Victoria.

Consejo de Guerra.

Sentencia y Fallo. 

En la plaza de Sevilla a 12 de Septiembre de 1939. Año de la Victoria.

Reunido el Consejo de Guerra Permanente número Uno de aquella.compuesto por los señores expresados al margen, para ver y fallar las sumas y las instruidas contra J. R. A., de 27 años, natural y vecino de Gerena, soltero, cantero, con instrucción y que ha sido procesado en el año 1934, por motivos de carácter social.

RESULTANDO: Que el procesado J. R. A., comunista, afiliado a la C. N. T., muy destacado entre los elementos extremistas de Gerena, tomó parte en requisas, saqueos y otros desafueros, habiéndose significado bastante en las elecciones para Diputados celebradas en el mes de Febrero de 1936, y si bien se le atribuye haber tenido intervención en la muerte de un aviador falangista, en La Algaba, este extremo no se haya cumplidamente probado como lo están los anteriormente referidos. Huyó a la zona roja y ha prestado servicios en el Ejército marxista.

CONSIDERANDO: que los hechos realizados y que se declaran probados a los efectos legales correspondiente al acusado J. R. A., son constitutivos de un delito de Adhesión a la Rebelión Militar que castiga el párrafo segundo del artículo 238 del Código Castrense, ya que teniendo en cuenta la significación marcadamente extremista de dicho individuo, sus antecedentes, sus actividades y el modo de producirse durante la dominación roja, en el pueblo de su vecindad, es indudable que se hallaba solidarizado con la Rebelión Militar persiguiendo los bienes de la misma; y de cuyo delito debe responder dicho sujeto por su participación directa y voluntaria en los hechos probados.

FALLAMOS:

Que debemos condenar y condenamos al acusado J. R. A, como autor de un delito de Adhesión a la Rebelión Militar, sin circunstancias modificativas de responsabilidad criminal, a la pena de RECLUSIÓN PERPÉTUA o de TREINTA AÑOS de duración, que llevará como accesorias la de Interdicción civil y la de inhabilitación absoluta.

Para el cumplimiento de la pena principal impuesta, le será de abono al sancionado todo el tiempo de prisión preventiva que lleva sufrido.

Liquidación de la condena, donde se dice que el reo no podrá salir de prisión, hasta el 8 de Abril de 1969.
- - -

Comisiones provinciales de examen de penas, del Ministerio del Ejército.

La revisión de las penas dictadas por los tribunales militares durante la Guerra Civil Española, se inició tras la creación de las comisiones provinciales de examen de penas mediante Orden de la Presidencia del Gobierno de 25 de Enero de 1940.

En el preámbulo de la Orden se señala que esta comisiones se crean con el fin de revisar las condenas por delito de rebelión dictadas desde el 18 de Julio de 1936, por los tribunales militares (auditorías y consejos de guerra) contra aquellos que habiendo dado su apoyo al bando republicano durante la guerra civil, se habían opuesto al llamado Alzamiento Nacional, tras haberse comprobado la falta de uniformidad de criterio de tales tribunales a la hora de dictar sus condenas, lo que daba lugar a que impusieran penas muy distintas para actos de la misma gravedad.

Esta revisión se haría de oficio, sin necesidad de que los condenados lo soliciten previamente.

J. R. A. recibe el certificado de resolución ministerial el 23 de Junio de 1944, donde se le conmuta la pena de RECLUSIÓN PERPÉTUA o de TREINTA AÑOS, por una de QUINCE AÑOS DE RECLUSIÓN MENOR.

-  De la Prisión Provincial de Sevilla, comunican a 3 de Noviembre de 1944 al Juzgado Militar Eventual nº 17, que el penado por el que se han interesado, y que fue de este establecimiento, había sido transferido a la 5ª Agrupación de Colonias Penitenciarias Militarizadas, en 13 de Junio de 1942, para trabajar por orden del C. Directivo.

-  Con fecha 16 de Noviembre de 1944, el Capitán General de la Segunda Región Militar, envía un telegrama postal al Juez de Ejecutoria nº 17, remitiéndole certificado de resolución definitiva, con el fin que se practique la nueva reducción de condena de acuerdo con la conmutación aprobada y demás diligencias de ejecutoria; concediéndole conforme al art. 7 del Decreto de 2 de Septiembre, los beneficios de prisión atenuada.

-  Desde la Audiencia Provincial de Sevilla -Servicio de Libertad Vigilada- informan al Juez de la plaza nº 17, el 23 de Enero de 1945, de que tiene el honor de participar a V. S. que el liberado condicional J. R. A., tiene su domicilio en esta capital en la Barriada del Cerro del Águila, calle...

Séis años estuvo en prisión, J. R. A., y nueve, en libertad vigilada, hasta que terminó su nueva condena  el 11 de Abril de 1954.

Fuentes: Bibliografía y archivo particular.

Si deseas ver otros temas relacionados con el pueblo de Gerena, por favor, haz clic: AQUÍ.