Incendian y saquean la Ermita de Nuestra Señora del Águila, de Alcalá de Guadaira (Sevilla).
Portada de Nuestra Señora del Águila.
Torre del templo de Nuestra Señora de Águila.
La ermita de la Virgen del Águila, patrona de la ciudad, coronada canónicamente, fue la primera y única parroquia de Alcalá de Guadaira, hasta la fundación de la iglesia de San Miguel. Como este pueblo, en sus orígenes fue una fortaleza, su primitivo templo parroquial fue el de Santa María del Castillo, en donde se veneraba la Virgen del Águila, y enclavado en el centro de la misma, según costumbre de los conquistadores de aquella época. El Santuario de estilo mudéjar, fue levantado en el siglo XIV, y ampliado en el XV, siendo de nuevo restaurado en el siglo XVIII, con motivo del terremoto de 1755.
Interior de la Ermita de la Virgen del Águila. 1914.
La iglesia se cubría por bóvedas de madera, que se perdieron totalmente por el saqueo y posterior incendio ocurridos en 1936, como consecuencia de los desórdenes de la Guerra Civil Española. El acceso a la misma la componen dos portadas: la principal, de la misma época del templo quedó intacta y solo ahumada en su parte superior, y la portada del mediodía, de estilo barroco se conservó también en perfecto estado, salvo un azulejo moderno que había en uno de sus costados, que fue destruido.
Interior después del incendio.
Interior después del incendio.
De la capilla mayor que solo tuvo sus muros ennegrecidos, se conservan dos ángeles lampareros a los que les faltaban los rostros y otros elementos desprendidos por el calor. Tampoco hizo mucho estrago el fuego en la capilla de la cabecera de la nave de la Epístola, así como en la del Evangelio, del siglo XVI.
Capilla mayor antes del incendio.
Nacimiento, de Juan Sánchez de Castro (destruido).
Nacimiento, (detalle).
La venerada imagen de Nuestra Señora del Águila, patrona de la villa.
Entre los objetos que desaparecieron en el incendio, hay que resaltar la imagen titular de la Virgen del Águila, notable ejemplar de la iconografía medieval; una tabla del Patriarca de la pintura sevillana, Juan Sánchez de Castro (siglo XV) representando la historia de la Natividad, de supremo valor, y el bellísimo grupo de Santa Ana, la Virgen y el Niño, interesantísima talla del círculo de Jerónimo Hernández, producida hacia 1580.
Santa Ana, la Virgen y el Niño (destruido).
Si deseas ver otros atentados contra edificios religiosos de Sevilla y su provincia, por favor, haz clic: AQUÍ.
He sentido mucha pena ver los estragos que hizo ese incendio intencionado por auténticos descerebrados que ni siquiera supieron ver el incalculable valor de lo que quemaban pues el odio les cegó por completo.No sabía que había una Virgen del Águila, en mi pueblo está la Virgen de la Uva.Saludos
ResponderEliminarMuchas gracias, amiga Charo.
EliminarUn saludo.
Bel post con foto molto belle.Ciao
ResponderEliminarGracias, Olga.
EliminarSaludos.
Earthquakes and fires are highly destructive forces. We can do nothing about earhquakes, but fires are mostly man-caused. It's heart-breaking to see in your pictures the blackened walls of the Lady of the Eagle church, and read about the objects of religious and historic value destroyed by the fire and looting!
ResponderEliminarGracias, Duta.
EliminarUn cordial saludo.
Estuve ahí hace muchísimos años, Manuel, pero no tenía ni idea de lo que hoy he visto aquí. Texto, historia, imágenes, magnífico. Yo ya tengo muchos años, pero me encanta que exista gente que como tú bien haces se dedique a divulgar nuestra historia, nuestra cultura y nuestro patrimonio.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte, Manuel.
Muchas gracias, Enrique.
EliminarUn fuerte abrazo.
Muchas iglesias se perdieron por la misma causa. Eso es la consecuencia de la barbarie que acarrea la guerra. Las obras de arte deben ser repetadas, porque es el mejor legado que podamos darle a nuestros hijos.
ResponderEliminarBesos.
Your words are the truth! I agree with you 100%!!! I salute you from Poland!
EliminarTotalmente de acuerdo contigo, amiga Antonia.
EliminarGracias, y un besito.
Muchas gracias, Anna.
EliminarAbrazos.
Manuel very interesting story. I would like to be in that Temple one day. Very nice old photos you posted too. Manuel I salute you and I wish you good days!
ResponderEliminarDe nuevo gracias.
EliminarOtro abrazo, Anna.
Las iglesias y ermitas hacen parte de la historia fundacional de los pueblos. DE ahí, su arraigo en la población. Éstas de Alcalá de Guadaira, son demás distintivas de la localidad, como aquí en mi tierra, La capilla de las Clarisas, que prácticamente es también fundacional, con su estilo gótico, Un abrazo. Carlos.
ResponderEliminarMuchas gracias, Carlos.
EliminarUn abrazo.
Pena pero también repulsión me causan que existan (porque todavía existen) seres que con cualquier motivación (sería demasiado llamarlo razón) ideológicas, políticas o religiosas cometan actos tan aberrantes contra la historia y memoria humanas y el arte.
ResponderEliminarAbrazo sin sombrero ante tu pasional esfuerzo y dedicación.
Muchas gracias.
EliminarUn abrazo, Carlos.
Otro templo que fue destruido por la barbarie y la sin razón.
ResponderEliminarEl patrimonio se vio muy mermado en determinadas zonas...una pena.
Besitos
Muchas gracias, Isabel.
EliminarBesitos.
Hola Manuel, hasta donde es capas de llegar el ser humanos para satisfacer sus impulsos. Pocos sitios se han librado de estas barbarie, en esa época tocaban las iglesias, y actualmente los incendios forestales, y más cuando son intencionados, que se sientes una importancia ver como todo se pierde. Y digo yo, no nos damos cuenta de que de una manera o de otra, todos somos víctimas.
ResponderEliminarCuídate. Un fuerte abrazo.
Muchas gracias.
EliminarUn abrazo, Cristina.
Hola Manuel
ResponderEliminarLo primero, decir que espero que este coment no se pierda quien sabe donde.
Como te respondí en me blog, y por si acaso, ¿te fijaste en los spam? Esto en relación a las 3 veces que intenté publicar en la entrada anterior y ninguno de los 3 apareció.
Ahora, respecto a esta entrada, otro bien documentado y completo informe amigo.
¡Tristeza! Esa ermita y tanta historia destruida por la sinrazón de determinada gente.
Abrazo yendo amigo ¡buen jueves, viernes y días por venir!
Gracias, Lu, y perdona que este comentario no haya salido en su momento, pero es que lo acabo de encontrar en spam, rectifico, lo acaba de encontrar mi hijo, que me está ayudando con este problema, así como también te digo, que de los tres que había tuyos, al darles que no eran spam, solamente han salido estos dos, el tercero, se ha debido de perder el el limbo del olvido porque no aparece en su entrada correspondiente, lo mismo que me ha pasado con otros, de los muchos que he encontrado ahí, que unos salen y otros no.
EliminarUn fuerte abrazo, y espero que esto se haya solucionado
No puedo llegar a comprender, lo que pasa por la mente de esas personas destructivas de estos tesoros históricos y tan queridos para el pueblo que los tiene.
ResponderEliminarMuy interesante este reportaje que como todos los que compartes, nos acercan a un conocimiento de tu tierra y de la historia. Maravilloso trabajo el que haces.
Fuerte abrazo Manuel.
Gracias, Ángela.
EliminarUn fuerte abrazo.
Que lástima que la intolerancia y la violencia nos hayan privado de conocer esas imágenes
ResponderEliminarPaz
Isaac
Gracias, Isaac.
EliminarUn abrazo.
Linda ermita, adoro descubrir el pasado en tu blog. Te mando un beso.
ResponderEliminarGracias, Judit.
EliminarBesos.
Hola Manuel. Ayer te dejé un comentario. Hoy no está. ¿¿¿¿ ????
ResponderEliminarNo sé que pasa, no entiendo como desaparecen mis coment si me avisa "se ha guardado, será visible tras ser aprobado"
Bueno, no se
Amiga, Lu, ya te he respondido en el comentario anterior de esta entrada.
EliminarAbrazos.
Excelente entrada Manel, asi podemos ir conociendo tu ciudad que es una maravilla. Un saludo.
ResponderEliminarGracias, Ana.
EliminarUn saludo.
Hola, Manuel.
ResponderEliminarEsto son los resultados de las guerras... a mí se me pone una mala leche... que los cogía y los metía dentro. Es igual que los incendios forestales, aunque algunos son por accidentes. Todos nos vamos a ver muy mal con tantos fuegos.
Pero en fin, dejemos esto y sigamos la vida, que es corta, jajaja. Que lo pases bien y esperemos que refresque un poco. Un abrazo.
Gracias, amiga Piedad.
EliminarUn abrazo.
Interesante articulo en el que una vez mas nos comentas los desastres por la incultura de la gente que no sabe reconocer el arte fuera de sus creencias.
ResponderEliminarSaludos.
Muchas gracias.
EliminarUn saludo, Tomás.
Cuantos tesoros y cuanta historia encerraban estos monumentos y estos templos, cuanta sin razón en destruirlos y borrar o hacer desaparecer todo esto,
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Muchas gracias.
EliminarUn fuerte abrazo, José Antonio.
ResponderEliminarOtra más que recibió los envites de los que no aprecian ni el arte ni aquello que huela a catolicismo. La España de antes y que sigue siendo la España de ahora.
Tengo que pedirte disculpas apreciado Manuel, no he podido entrar antes, llevo un mes de jardinería que me lleva por la calle de la amargura, estas temperaturas insoportables, no hay jardín que las resista si no reciben algo de riego más de lo habitual.
Recibe un fuerte abrazo y te deseo buen mes de agosto amigo.
Gracias.
EliminarUn fuerte abrazo, Juan.
Estas destrucciones tan bárbaras son imperdonables.
ResponderEliminarSiempre interesante leerte.
Te mando un fuerte abrazo.
Gracias, amiga Amalia.
EliminarOtro abrazo para ti.
These images are so delicately captured with skills.
ResponderEliminarGracias, y bienvenido.
EliminarUn saludo.
Una tristeza que ya no esté, las obras de arte nunca se deberían destruir. Me encantó como siempre tu reportaje. Manuel quieres unos higos ? Abrazos.
ResponderEliminarMuchas gracias, Teresa. Y claro que si quiero.
EliminarUn abrazo.
No comprenderé nunca el saqueo, incencios y destrucción del arte cultural,por mucho que se esté en guerra cuando es patrimonio de todos,
ResponderEliminarDe verdad que pena, gracias Manuel por dejar testimonio de ello
Un abrazo
Gracias, Carmen.
EliminarUn abrazo.
Um post brilhante que é um alerta para a necessidade de preservarmos o nosso património histórico. É tão triste quando apenas ficam fotos e postais para contar e mostrar como era.
ResponderEliminarAbraços
Muchas gracias.
EliminarUn abrazo, María.
Son icontables las piezas artísticas que se perdieron en nuestra guerra incivil o antes de su estallido, incluso durante la Semana Trágica o los acontecimientos de Asturias. Y si nos retrotraemos más, las desapariciones de patrimonio en la desamortización o en la guerra de Independencia. Y no hay remedio...
ResponderEliminarUn saludo
Gracias.
EliminarUn saludo, Carmen.
Es una verdadera pena que algunos no creyentes incendien ermitas tan bonitas y que les gustaría ver a nuestros hijos y a nosotros mismos, pyues ya veo que hace muchos años que ocurrió.
ResponderEliminarEspero que esto no vuelva a suceder, por el bien de todos.
Un abrazo.
Gracias.
EliminarUn abrazo, María de los Ángeles.
Una de tantas, por lo menos nos queda contarlo y como tú lo haces Manuel bien explicado y documentado.
ResponderEliminarGracias por rescatar esa parte artística de la historia.
BESOS
Gracias, María José
EliminarBesos.
Um magnifico edifício, que assistiu a acontecimentos bastante trágicos...
ResponderEliminarAdorei ficar a conhecer a sua história, que desconhecia por completo! Estamos sempre a aprender, por aqui! Grata por isso, Manuel! Excelente trabalho, como sempre!
Um grande abraço!
Ana
Muchas gracias, amiga Ana.
EliminarY perdona pero no he visto este comentario tuyo, hasta hoy.
Un fuerte abrazo.