Iglesia parroquial de San Sebastián, de Alcalá de Guadaíra (Sevilla).
Iglesia compuesta de tres naves de estilo mudéjar tardío, de la primera mitad del siglo XV, con posteriores restauraciones en los siglos XVIII y XIX, entre otros motivos por el terremoto de Lisboa de 1755.
Y como consecuencia de la acción marxista del 19 de Julio de 1936, la iglesia fue incendiada perdiendo las cubiertas, salvo la del presbiterio, y todas las obras de arte que a continuación reseñaremos. Siendo el ilustre arquitecto sevillano, D. Juan de Talavera, el encargado de las obras de reconstrucción.
Vista de las tres naves, desde lo que fue el Coro.
Fotografías tomada por autor anónimo aunque bajo la firma de los "Servicios Fotográficos de Salamanca", nos muestran el estado en que quedó la iglesia de San Sebastián tras el incendio provocado durante la guerra civil. Fueron publicadas, en 1938, por la revista parisina L´Ilustration, bajo el nombre de Guerre Civile en Espagne.
La Capilla mayor, antes del incendio.
Capilla Mayor.
Por laudable celo del Sr. Cura Párroco, quien regía dicho templo, presidía el presbiterio la interesantísma pintura de San Sebastián, enfermo, con Santa Irene a su lado, que el insigne maestro Francisco Pacheco pintó en 1611, según declaró el mismo, para el hospital de dicha advocación de la referida villa. Con la pérdida de este notable lienzo perdió el arte universal uno de los más interesantes ejemplares de la fuerza de penetración del realismo barroco español, en los pintores romanistas andaluces.
San Sebastián enfermo, de Francisco Pacheco (destruido)
Nave del Evangelio.
En el testero colateral existía un retablo neoclásico con la imagen de vestir de Nuestra Señora de Gracia.
En uno de los brazos de cierta especie de crucero que la iglesia ofrecía, se hallaba un rico retablo del siglo XVIII, con bella imagen de la Inmaculada, atribuida al escultor Duque Cornejo.
Seguía a continuación otro retablo, constituido con elementos de acarreo procedentes del antiguo retablo mayor de la iglesia, en el que intervinieron los maestros Jerónimo Hernández, Andrés de Ocampo, Gaspar del Águila y Blas Hernández, de 1579 a 1588. En el referido retablo así formado, recibía culto una imagen de Santa Teresa de Jasús.
En la capilla de Nuestra Señora de los Dolores, se hallaba un retablo del siglo XVIII, donde recibía culto una imagen de dicho título con Jesús descendido, en su regazo.
Por último, un interesante retablo donde se veneraba devota imagen de Crucificado, y en él, tablas de pintura representando Santa Ana, San Juan Bautista y otros dos Santos, además de bajo relieve de la Cena Sacramental, con puerta de Sagrario.
Todas estas obras de arte desaparecieron, víctimas del sectarismo de los marxistas, así como las que describiremos en la nave siguiente.
Inmaculada (destruida)
Nave de la Epístola.
En este brazo de crucero, se hallaba la capilla de Ánimas, donde se encontraba un retablo de hacia la mitad del siglo XVIII, con un relieve de dicha advocación y otro de la Santísima Trinidad.
Seguía luego un retablo neoclásico dedicado al Patriarca San José; otro del mismo tipo reseñado en la nave frontera que se dedicaba a Santa Teresa, tributándose culto en éste a San Francisco; otro retablo dedicado a Santa Ana, que procedía del Convento del Carmen de esta villa, y estaba en la capilla bautismal; y, por último, un Ecce-Homo, perteneciente al estilo del siglo XVIII.
Fuentes: Bibliografía y archivo particular.
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Estas grandes obras de arte, deberían ser respetadas y no ser destruidas en ninguna contienda bélica.
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas gracias, Antonia.
EliminarUn barazo.
Thank you for all the effort you put into compiling and sharing these histories.
ResponderEliminarGracias, amiga.
EliminarUn abrazo.
Era una bella iglesia te mando un beso.
ResponderEliminarMuchas gracias, Judit.
EliminarOtro beso va.
Una chiesa che ha vissuto dei tragici momenti, tra il terremoto e l'incendio !! Le opere d'arte andrebbero protette e non distrutte, che peccato.!! Un caro saluto.
ResponderEliminarGracias, Mirtillo.
EliminarUn saludo.
Cuando veo la destrucción de obras de arte, de cualquier índole, me hierve la sangre, así como la eliminación de obras únicas e históricas.
ResponderEliminarUna entrada espectacular Manuel. Da gusto leerte!
Un fuerte abrazo bajo aspersores de agua fría :))
Gracias, Gumer.
EliminarUn fuerte abrazo.
De sucesos tan lamentables como el que nos informas aquí, Manuel, está nuestro País lleno.
ResponderEliminarMagnífico artículo, como siempre, Manuel.
Un abrazo.
Gracias, Enrique.
EliminarUn abrazo.
Las fotografías se ven antiguas, antiguas, un lujo. En especial me gusta la última, la cara de la Virgen, qué fina, es preciosa.
ResponderEliminarSAludos.
Muchas gracias.
EliminarUn saludo, Manuela.
Una pena la destrucción de estas obras de arte...la ignorancia y el fanatismo pueden ocasionar muchísimo daño.Saludos
ResponderEliminarGracias.
EliminarUn saludo, amiga Charo.
Creo una desgracia lo que realizaron durante la guerra civil destruyendo iglesias. Te diré que para mi entender cualquier tipo de templo fuera del horario de culto lo considero un museo.
ResponderEliminarSaludos.
Gracias, Tomás, y yo pienso igual.
EliminarUn saludo.
It's sad to read about destruction of churches and works of worship (like in the case of San Sebastian).
ResponderEliminarI like the picture with the lovely image of the Immaculate, at the end of your post.
Muchas gracias.
EliminarUn abrazo, amiga Duta.
escelente reportaje de la iglesia parroquial de San Sebastian de Alcala de Guadaria , no lo conocia
ResponderEliminary entrar en el es como vivir la emoción del arte sin tiempo... una maravillosa luz que se posa en tu retina
y nos transmites con cada post Manuel , desde mi tierra a la tuya mi deseo de que tengas una feliz semana
del mes de agosto , un fuerte abrazo Manuel , tu amigo .jr.
Muchas gracias.
EliminarUn abrazo, amigo.
Mi querido amigo Manuel:
ResponderEliminarTu publicación de hoy, excelente.
Me impactó la figura de San Sebastián enfermo.
Gran abrazo!!
Muchas gracias, Ricardo.
EliminarUn abrazo.
Muy de acuerdo con Antonia, las obras de arte nunca deberían ser destruidas. Gracias por tan buen reportaje. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias, Teresa.
EliminarUn abrazo.
Manuel, es siempre triste saber de grandes obras de arte que se han ido perdiendo de manera intencional.
ResponderEliminarPor eso es necesario recordar la historia, reconstruir y avanzar para no volver a cometer los mismos errores.
¡Fantásticas las fotos antiguas!
Abrazo va
¡Feliz domingo!
Gracias, Lucía.
EliminarUn fuerte abrazo.
Desde tiempos inmemorables se ha destruido la casa de Dios, es que nada bueno arrastra el mal bajo sus patas funestas, por decir lo menos y aún ahora la furia del maligno sigue su siniestra lucha... El se sabe perdedor por eso su rabia de querer desaparecer lo que de testimonio de Dios verdadero... Quien conoce algo de la verdad sabe que no lo logrará, así que en todas las iglesias del mundo hay una promesa viva qué no fallará.
ResponderEliminarTe dejo un abrazo 🌸🙏💐🌸🙏
Muchas gracias, amiga.
EliminarUn abrazo.
Hermosa iglesia.
ResponderEliminarLas obras de arte nunca deben ser destruidas. Es muy lamentable.
Buenas fotos.
Un fuerte abrazo. Feliz semana.
Gracias, Amalia.
EliminarUn fuerte abrazo.
Qué pena que esa iglesia sufriese el vandalismo de las personas alteradas que había en esa época por diferentes motivos,, que nada tenían que ver con los muros de la iglesia, ni con el arte que se guardaban en el interior de la misma. Aporta el bellísimas fotografías de ese entonces, y el artículo es excelente.
ResponderEliminarGracias, amigo.
EliminarUn abrazo.
Qué gran tarea desarrollas, Manuel, en la divulgación y preservación a la par de tu patrimonio cultural. Perdona la demora en venir...
ResponderEliminarAbrazo hasta vos.
Muchas gracias, Carlos.
EliminarUn abrazo.
Hola Manuel!!! Que pena que una obra de arte así termine en tan lamentable situación... Ahora mismo imagino que lucirá esplendorosa... Buen fin de semana...
ResponderEliminarMuchas gracias, Ana.
EliminarUn saludo.
Muy interesante, como todas tus entradas a traves de ellas estoy conociendo Sevilla, suelo ir todos los años. Un saludo.
ResponderEliminarMuchas gracias.
EliminarUn saludo, Ana.
Realmente es triste ver como el fanatismo destruye obras de arte que se perderán para siempre
ResponderEliminarPaz
Isaac
Gracias, Isaac.
EliminarAbrazos.
LO reitero: las construcciones donde se impone una buena arquitectura, hay que conservarlas, porque no son sólo historia y memoria, sino espacios para apreciar el gusto y belleza de estructuras afincadas con las comunidades, por su contexto espiritual. UN abrazo con afecto y aprecio. Carlos
ResponderEliminarMuchas gracias, amigo Carlos.
Eliminarun abrazo.
Le tue narrazioni sono sempre interessanti e curate e io le leggo sempre con piacere. Un caro saluto.
ResponderEliminarMuchas gracias, amiga.
EliminarUn saludo.
Lamentável a perda de obras históricas!
ResponderEliminarMais uma vez foi um gosto imenso, percorrer a História por aqui! Devia ter sido uma igreja lindíssima, antes do incêndio de 1936...
Grata por mais uma fabulosa publicação de cariz tão interessante, Manuel!
Um grande abraço!
Ana
Muchas gracias, amiga Ana.
EliminarUn fuerte abrazo.